Arles levanto el cuerpo de Vheilian por los cabellos –MIRAME – le ordeno, Vheilian levanto su mirada, pero esta vez algo era distinto su rostro comenzaba a cambiar, una bruma le cubrió, arles sintió una fuerte punzada en su mente y soltó a Vheilian clavándose en lo que pasaba, aquella bruma comenzó a formar una pequeña tormenta que cubría el cuerpo de Vheilian –EL PODER DE UN DIOS PUEDE SER ILIMITADO SIEMPRE Y CUANDO LA CREENCIA POR ESTE SEA GRANDE- Neptuno salió de entre la bruma imponente aquella creatura con poco mas de 3 metros de altura, la armadura que cubría su cuerpo hasta la cintura y un largo vestido cubría sus piernas, una rosa roja en el medio adornaba lo imponente de aquel ser en sus largos brazos se extendía por ambos lados dos grandes filos en forma de zigzag, arles clavo la mirada en aquel ser, Zeus no hizo más que reír a carcajadas provocando la molestia de arles el cual miraba el cuerpo de Neptuno con fiereza, levanto su brazo una vez más en dirección a Neptuno presionando su puño, Neptuno sintió la presión del poder de arles y quito la venda de sus ojos por un instante arles se perdió ante la hermosura de aquellos ojos y estaba convencido que había logrado ver lo imponente del universo, al tornarse aquellos ojos negros al completo arles se puso en alerta, la figura enorme de Neptuno apareció de improviso ante sus ojos, haciéndole un corte profundo en el pecho con los filos de sus brazos y golpeando en asenso su cara, una patada en su estomago con violencia lo lanzo lejos, arles trato por todos los medios de captar la energía de aquel ser, -Aquí estoy – dijo Neptuno detrás de arles, este giro rápidamente pero sintió como era golpeado en su espalda y tirado de sus cabellos, se arrodillo y sintió como Neptuno desgarraba la espalda de su cuerpo con los filos de sus brazos, sintió luego dos filos de espada entrar en su espalda y traspasar a la altura de su pecho fue pateado para lanzar su cuerpo contra el piso y sintió como los filos salían de su cuerpo al impactar su cuerpo, una y otra vez Neptuno clavo con violencia en el cuerpo de arles las catanas, sin decir nada, concentrado en hacer el mayor daño posible, arles estaba en shock, no podía pensar en nada mas que no fuera el dolor en su cuerpo y la velocidad de aquel ser y el hecho de no saber dónde estaba su amigo, de pronto y para la sorpresa de Neptuno el cuerpo de arles comenzó a brillar intensamente, y fue como si de su espalda se abriera una puerta, de su interior y al tiempo que Neptuno se alejaba, salieron seis criaturas equipadas con garras – son los errantes – pensó Neptuno al mirar aquellos seres, sabía que tenía que actuar rápido, de sus ropas saco una varita con ella comenzó a hacer alteraciones en el aire dibujando en el aire una especie de jeroglíficos celtas, el embate de los dos primeros seres no lo detuvieron, sintió su armadura quebrarse pero continuo concentrado –salvio exia pertria basempa – aquella letanía salía de sus labios y su varita se movía con maestría, dos entes mas golpearon su cuerpo sintió el dolor punzante en su pierna, sangraba los dos últimos se lanzaron sobre el clavando sus garras en su estomago y partiendo sus ropas, en su mente Neptuno pensaba en una sola cosa, en los ojos de aquella mujer que había cautivado su corazón y se mantuvo de pie firme y valiente continuando con su largo hechizo, - expenzo dragul famone – los errantes desgarraban su piel, al no tener cuerpo físico lo que haría en contra de ellos sería inútil – recordó la mirada de su princesa y entonces paso cerro sus ojos y los abrió dejando salir su triste llanto y el poder de aquel hechizo, el movimiento de su varita se detuvo y una red dorada apareció aprisionando a los seis errantes junto con el cuerpo de Neptuno aquella red se cerró presionando los cuerpos de todos dentro –Hecho esta lord Vheilian, es su turno – aquella red exploto acabando con la vida de los 7 cuerpos en su interior.
-Hypnos, Thanatos – grito Zeus desesperado, la llegada de dos cuerpos al lugar desde el cielo hasta el lugar donde yacía el cuerpo de arles, el cual aun boca abajo había dejado de brillar, dejando su cuerpo inconsciente en la tierra, aquellos seres levantaron el cuerpo de arles levantándolo en el aire con su poder, los hermanos hypnos y thanatos ambos semidioses a las ordenes de Zeus examinaron el cuerpo de arles negando con la cabeza -¿Está bien? ¿Arles está bien?- dijo Zeus con un tono algo preocupado – ¿Desde cuándo te preocupa mi bienestar padre?- dijo la voz de arles al impactar el rostro de hypnos y thanatos con ambos pies y caer con firmeza en la arena, los dos hermanos llevaron sus manos a la altura de su cintura tomando sus espadas sin desenvainarlas mirando en dirección a Zeus este extendió sus mano y dio la señal de que atacaran, rápidamente se fueron en dirección a arles atacándolo con sus espadas, este atrajo su espada y se lanzo sobre ellos, un estruendo interrumpió su avance, ninguno había reparado en que la bruma aun estaba en aquel lugar cubriendo algo, un grito de guerra se escucho y una sonrisa divertida se esbozo en el rostro de arles, el cual espero con su espada en alerta la llegada de su amigo, Vheilian salía de la bruma, las heridas en su rostro eran evidentes, pero algo había cambiado, una armadura blanca cubría su cuerpo y un brillo alrededor de su rostro le daba un toque divino, arles suspiro complacido al notar que su amigo estaba bien, Vheilian camino con firmeza en dirección a arles con una mano en la funda de su catana y su dedo gordo justo debajo de la empuñadura su mano enfrente en dirección a ella caminaba sin dejar de ver a hypnos y thanatos, sintió rápidamente el movimiento de Zeus el cual lanzo un rayo en dirección a él, salto con elegancia hacia enfrente dejando pasar el rayo y camino esta vez inexpresivo – VAMOS ATAQUEN ¿QUE DEMONIOS ESPERAN?- dijo Zeus y los cuerpos de ambos hermanos se lanzaron sobre Vheilian, pero arles tomo a thanatos de los hombros y comenzó a forcejear con él, Hypnos llego con velocidad hasta el cuerpo de Vheilian, el cual al sentir la proximidad movió su dedo lanzando la espada hacia arriba y cogiéndola con maestría y lanzando un ataque en dirección a hypnos el cual torpemente se encajo en aquella arma Vheilian giro la catana y la clavo aun mas dentro, sacándola rápidamente y haciendo un corte descendente en sus ropas, la vestimenta de hypnos era de piel al completo, la única protección en ella eran sus brazos los cuales tenían filos alrededor de, el, ambos hermanos forcejearon con sus rivales, estos diestros en la lucha los impactaban con sus golpes, cortes y empujones, saltaron y se reunieron detrás de ellos, arles y Vheilian chocaron quedando espalda con espalda, giraron para mirar a sus rivales no sin antes dedicarse una sonrisa y salir disparados sobre ellos, Zeus iracundo comenzó a lanzar rayos sobre los cuerpos de arles y Vheilian, los cuales pasaban de largo sin tocarlos, se movían con elegancia y velocidad, golpeando y atacando aquellos cuerpos que sufrían cada uno de sus embates, arles se agacho y Vheilian uso la espalda de arles como soporte para lanzar su cuerpo hacia enfrente y clavar su catana en el cuello de thanatos, un giro rápido de arles paro el rayo azul que había proyectado hypnos en dirección a Vheilian, thanatos retrocedió sangrante y se topo con la mirada de arles, llena de ira, mientras Vheilian atacaba a hypnos sin piedad, lanzando patadas y golpes, cortes a sus brazos, paso algo que dejo helado a Zeus en las alturas, Vheilian movió su espada hacia atrás hizo una finta girando su cuerpo y corto la cabeza de hypnos de tajo, rápidamente Vheilian puso su mano en su pecho –ALMA FORTE- grito y energía dorada salió de su mano dejando salir del cuerpo muerto de hypnos un liquido dorado flotando hasta su boca, Vheilian lo trajo y salió en dirección a thanatos el cual desquiciado por la muerte de su hermano hacia un esfuerzo inútil por llegar hasta su hermano, arles clavo en su pecho su enorme espada riendo a carcajadas levantándola violentamente hasta su cabeza partiendo en dos el cuerpo de thanatos – No pierdes el toque amigo mío- dijo arles al lamer la hoja de su espada mirando en dirección a Vheilian, este le sonreía jadeante pero alerta se lanzo en dirección a arles y ambos miraron a Zeus el cual rojo de coraje suspiraba con ansiedad cuatro luces bajaron colocándose 2 de cada lado de Zeus desvelando las figuras, Apolo, Poseidón, hades y Hermes le miraban iracundos desde el cielo, un destello impresionante y Vheilian se sumergió en una imagen aterradora Aschly, Leydy, Pilar, Carmilla, Sara, Raynex, Rigoberto y Samuel clavados en cruses un poco mas adelante de ellos su padre y su madre y delante de todos su esposa, sus cuerpos estaban destrozados con sangre en su piel, el sol salía poco a poco y Vheilian comenzó a llorar sin poder evitarlo, aquella imagen desapareció y noto como arles se lanzaba sobre él, su mundo se vino abajo, aquello era más de lo que podía aguantar, tomo su catana con ambas manos y su cuerpo comenzó a brillar con más intensidad con fuerza lanzo la espada para atrás clavándola en el pecho de su amigo, giro su espada y la clavo mas, arles en sollozo –Hazlo ya – Vheilian giro su cuerpo soltando la catana solo por un instante, tomo la catana de nuevo con una mano y miro a los ojos a su amigo, este lloraba –Vheilian amigo, por favor nunca me olvides – se abrazo al cuerpo de Vheilian por un momento y una vez más cerca de su odio –Hazlo ya amigo mío- se separo de Vheilian y le regalo una última sonrisa Vheilian saco la catana hizo un corte a su propio brazo y levanto su catana envuelto en lagrimas giro su cuerpo y corto la cabeza de su amigo dando un grito desgarrador miro en dirección a Zeus con odio –ERA TU HIJO MALDITO- los cinco dioses descendieron pero se detuvieron justo antes de llegar al suelo, el cuerpo de arles se levanto del suelo y brillaba, un color rojo intenso cubría el cuerpo sin cabeza de arles, su cabeza se puso en su lugar y Vheilian giro, la mirada de arles le miraba sonriendo un destello hizo que cubriera sus ojos, aquel cuerpo se volvió sangre y cayo empapando a Vheilian de la cabeza a los pies, la sangre fue absorbida por su cuerpo, noto como sus brazos eran tomados con fuerza por dos de aquellos dioses, escucho un estruendo y abrió los ojos, como su ultimo regalo arles proyecto en su mente a todos los que amaba sonriendo y felices, sintió un dolor inmenso en sus ojos, -TE MALDIGO VHEILIAN, TUS OJOS NO VELVERAN A VER AQUELLOS QUE AMAS, COMO LO PROMETI QUEDAS LIBRE DE MI, PERO TE MALDIGO- Zeus clavo sus dedos en los ojos de Vheilian arrancándolos de tajo, no podía dejar de ver a su familia, sintió el impacto de un rayo en su cuerpo, después el filo de una espada atravesando su costado, un par de golpes más en su rostro y como desgarraban su armadura, los pies de 4 dioses golpeaban su pecho clavando una especie picos sobre el –HAZME UN FAVOR Y MUERE MI HERMOSO DIOS VAMPIRO- el cuerpo de Vheilian se levanto con gran velocidad en el cielo y ante los ojos de aquellos que querían acabar con el desapareció, no era podía resistir mas –moriré – pensó con tristeza y desesperación – moriré solo y sin lo que amo – noto su cuerpo que avanzaba en un momento se detuvo y noto como caía al vacio, no podía hacer mas nada se dejo caer, su espalda impacto con violencia el suelo y su cráneo estrello – POR CAIN!- una voz al fondo le resultaba familiar noto gente acercándose hasta el -¿TESORO?- era su madre – MI AMOR! – y el mundo para el cobro sentido escucho los gritos y exclamaciones de tristeza –está vivo – alguien lo tomo de los hombros y lo recostaron noto agua que le caía en el rostro –llueve – dijo en voz alta – no mi amor soy yo- su esposa lloraba su espalda sobre su regazo y Mairel lo peinaba acariciando y acomodando su cabello mientras lo miraba sin dejar de llorar – Te amo – …..
lunes, 31 de enero de 2011
Zeus En El Cielo Por Vheilian Sagara Parte 3
Solo lo dudo un instante, era tiempo aun de volver atrás con su familia, pero sabía también que eso no era posible – tienes que hacerte responsable de tus decisiones- dijo en voz alta como para calmar aquella ola de sentimientos que no le permitían continuar, lo sabía bien, tenía que continuar y enfrentar a su amigo en ese combate, subió deprisa el puente que llevaba hasta el Partenón de Zeus, era impresionante la velocidad con la que sus pies se movían a lo que tal vez sería su mente, un recuerdo le invadió justo al entrar en aquel lugar, su hijo Rigoberto de pie en aquel altar, noto en la primera fila a Sara y Carmilla envueltas en llanto, miro de reojo a rayne emocionada mirando la escena, leydy acurrada en el hombro de su esposo, Andrés miraba con admiración en dirección a él, noto la figura de su padre y su madre sonriendo para él, giro la vista y se encontró con su esposa, un vestido blanco hermoso y un velo blanco cubría su rostro, a pesar de eso se topo con su mirada llena de amor – Puede Besar A La Novia – dijo rigo emocionado, el día de su boda, la unión con el amor de subida había jurado amor eterno esa noche en presencia de sus seres queridos – Cuan buena ha sido esta vida para ti Vheilian – dijo una vez mas de regreso de sus pensamientos, noto aquella puerta al final del pasillo y entro apresurado, un golpe de luz cubrió sus ojos justo al momento de abrir aquella puerta.
-Bienvenido Mi Hermoso Lord Vampiro- dijo la voz potente de Zeus – Por un momento muchacho pensé que no llegarías – fijaba su vista en Vheilian como si se tratara de un objeto el cual quería poseer a cualquier costo – Estoy aquí Zeus habla ya – dijo Lord Vheilian sin recuperarse aun de aquel flashazo en sus ojos, camino torpemente y cayo serian acaso 3 metros, cayo de bruces al suelo golpeando su rostro en lo que pudo sentir era tierra firme y un delicado pasto cubría la superficie, se levanto rápidamente y distinguió por fin – Esto mi hermoso vampiro son los campos elíseos, un lugar digno para ver tu muerte – lo pudo ver la figura imponente de Zeus en su trono a casi 8 metro de altura inmenso, bajo su mirada, solo para encontrarse con el rostro de su amigo, sus sentidos quedaron paralizados ante la imagen de Arles, el cual le miraba fríamente, su armadura, aquella elijada para esa pelea en especifico era su favorita, una gruesa armadura en oro y detalles en plata, los adornos en el peto eran cientos y cientos de pequeños cráneos, las imponentes hombreras con un grosor impresionante, una abertura en medio de su pecho subía en forma de V hasta su cuello un poco antes de llegar a sus orejas, su casco en oro también con un T en medio que le permitía ver sus ojos, su boca y nariz pero que cubrían perfectamente su rostro, en la punta de aquel casco una línea en oro hasta su espalda adornada con pelo rojo, su amigo Arles camino en dirección a él, era cierto, su corazón lloro de tristeza, al notar los sentimientos de arles – TE PROMETO AMIGO MIO QUE SI ALGO LLEGARA A PASARTE, YO MISMO ME ENCARGARE DE QUE TU FAMILIA ESTE BIEN –ese pensamiento llego a su mente, Arles le miraba frio, pero aquel pensamiento venia de él, había decidido pelear con todo lo que tenía por qué intentar engañar a Zeus seria una tontería, lo mataría si fuera necesario con tal de protegerlo y el sabia mejor que nadie que el amor y devoción por su familia eran el eje de lord Vheilian.
Sus miradas se encontraron una vez más, lord Vheilian llevo sus manos a las empuñaduras de sus espadas esperando una reacción por un largo instante ninguno de los dos pudo moverse – VENGA YA QUE NO TENGO TODA LA VIDA POR DELANTE – dijo Zeus en un tono de burla y divertido por aquella escena – Ho padre, cuan cruel es tu corazón, dudo que tengas uno - la voz de Arles era cancina agobiada por la tarea, una tarea que no quería hacer, fue el primer golpe en su rostro, el casco negro impresionante de lord Vheilian se partió en dos dejando su rostro al descubierto, se tambaleo hacia atrás sin poder evitarlo lanzo su cabeza hacia enfrente para encontrase de lleno con el cráneo de arles el cual asestaba un golpe brutal a su abdomen, no podía, no quería hacerlo, golpear a su amigo era más de lo que Arles podía aguantar.
Vheilian sintió aquel golpe en su abdomen y sintió como el aire salió de su cuerpo, haciendo acopio de fuerzas salto tremenda patada directo al peto de arles, este por la potencia de aquel impacto giro su cuerpo golpeando con los nudillos envueltos en oro en la mejilla de Vheilian el cual sintió como un corte se abría en su mejilla llevo sus manos al rostro y miro sus dedos – venga ya arles ¿Por qué siempre tienes que hacerme sangrar primero- dijo Vheilian divertido, arles soltó algo parecido a una carcajada, esa distracción fue aprovechada magistralmente por Vheilian el cual se lanzo sobre el, justo enfrente de, el dio un salto de 360 grados estirando sus manos en la cabeza de arles y tomando su casco arrancándolo con violencia, Vheilian al caer al suelo lanza su cuerpo hacia atrás chocando con la nuca de arles, su cuerpo es detenido por la espalda de este, en un giro rápido arles toma por los cabellos a Vheilian, levantándolo de un rodillazo seco a su estomago y golpeando una vez más su rostro –EN LA CARA NO QUE DE ESO VIVO!- dijo Vheilian riendo a carcajadas, arles no pudo evitarlo y se hecho a reír también Vheilian proyecto su ante brazo con violencia al rostro de arles, un impacto brutal y un corte en su cara, pudo ver entonces su sangre – Hey amigo ¿acaso tú no eres el que dice que la venganza es mala? – aquello aquel momento los dos habían encontrado aun en ese instante el motivo por el cual sus corazones se habían unido, arles se lanzo sobre el brazo de Vheilian este al tener una armadura menos pesada y tosca pudo gira y patear las costillas de arles y lanzarse al ataque una vez mas esta vez sobre su cabeza tomando con ambas manos en un salto y golpeando su rostro con su rodilla, arles divertido llevo ambas manos a su nariz la risa le diversión que le provoco la reacción de su cuerpo ante el impacto de Vheilian fue algo que al mismo tiempo sorprendió a Vheilian –ttt-tu jajajaja amigo mío es la segunda vez que me haces sangrar en una lucha esto es un record – pudo ver la luz en arles, en ese momento no podía ser más feliz y ambos se sumergieron en un instante mágico, Zeus miraba absorto la escena, aquella pelea entre dos amigos, arles partió en dos el peto de la armadura de Vheilian, este al notar el peso y protección de arles se acerco rápidamente poniendo las palmas de sus manos en la armadura de arles y soportando la presión en sus costillas por un abrazo que le propinaba este, incendio sus manos y he hizo que el aire alrededor de ambos se calentara, de la armadura de arles comenzó a salir humo un grito de dolor fue escondido por la risa de arles el cual lanzo lejos a su amigo y quito con desesperación el peto de su cuerpo dejando ver su piel algo enrojecida por el calor, ambos se miraban Vheilian con sus manos en sus rodillas jadeando tratando de tomar fuerzas sin dejar de sonreír, con sus manos en la cintura dando profundas bocanadas de aire entre jadeaos arles dijo algo que apenas se entendió – Am a amigo mi mío cuan fu fuerte te has vuelto – Vheilian sonrió una vez mas y noto el estado de su cuerpo si bien estaba lastimado lo cierto era que solo eran golpes y moratones – tuve un maestro estupendo arles – dijo Vheilian también jadeando y sin dejar de reir, ambos se miraban con admiración y amor, era esa manera de hacer las cosas las que se convirtieron en el detonante de su amistad, aquella unión tan extraña era inevitable.
-BASTA YA DE JUEGOS ESTUPIDOS- Vheilian en su mente escucho gritos y sonidos de terror en su mente se quedo en shock al mirar la escena en su mente su castillo en llamas sus hijas gritando, todo lo que amaba estaba en peligro, fue sacado de aquella visión por un corte en su pecho, arles le miraba con su espada en el suelo sangrante y lagrimas en sus ojos, Vheilian miro su pecho un corte decencia de su hombro izquierdo hasta su costado derecho y sangraba pero era superficial aun que amplio, por un momento no supo qué hacer, su mente era un mar de sensaciones, sabía que se habían perdido en la emoción que era pelear entre ellos dos, un golpe en su quijada con el mango de la espada de arles lo puso en alerta rápidamente saco su espada y se lanzo sobre su amigo en un grito de dolor que desgarro la calma de aquel lugar la espada se encajo con violencia en el hombro izquierdo de arles dio un giro a su espada y la saco con violencia pateando el estomago de su amigo – PERDONAME VHEILIAN- dijo arles entre sollozos, estiro su mano en dirección a Vheilian y presiono su puño con fuerza, Vheilian sintió su cuerpo estremecerse el dolor invadió su mente y noto como su cuerpo se levantaba ligeramente del suelo en un intento por resistirse aquel control grito tan fuerte que arles bajo la presión en su puño pero fue motivado por un grito de Zeus –ACABALO YA MALDITA SEA – su cuerpo gritaba de dolor ante aquella muestra de poder de arles, sentía sus músculos tensarse por aquel poder impresionante, arles no dejaba de sollozar –perdóname amigo, perdóname Vheilian- en ese instante en su mente surgió un recuerdo.
Aquella noche presa del aburrimiento salió a la ciudad, era una noche fría y la luna brillaba llena y hermosa, entonces noto una figura, era un chica temblorosa la cual recorría aquel muro tratando de mantenerse de pie, el shock en aquella chica era evidente, golpeo su cuerpo y levanto su vista clavando su mirada en la de él, aquella mirada, aquel instante en que pudo ver dentro de su alma, un grito de auxilio en aquel silencio pudo sentir en su alma -¿Estás Bien? – pregunto estúpidamente Vheilian al salir de la profundidad de la mirada de la chica, aquella no respondió, todo su cuerpo temblaba, hizo lo que parecería una locura la abrazo y le hizo una promesa al tiempo que desapareció de ese lugar con la chica en brazos temblando y sin decir una palabra proyecto su mente en ese lugar quesería propicio para aquel encuentro noto la cima de aquella montaña, uno de sus lugares favoritos, en la cima solo un árbol, hermoso y con las hojas de este cayendo, la luz de la luna aumento más la belleza de aquella chica, aun con ella en brazos se recargo en el árbol dejándose caer y protegiendo con sus manos su cabeza le pregunto entre susurros - ¿Cuál es tu nombre?- la chica hizo acopio de fuerzas – Mi nombre es rayne – el cuerpo de Vheilian entro en shock y una visión invadió su mente, el cuerpo de una bella mujer sin un brazo y sangrante le miraba fijamente, aquella mujer no movió su boca pero pudo escuchar su voz en su corazón – Lord Vheilian, te conozco sé quién eres, por favor ayúdala, no permitas que le haga daño, una escena más invadió su mente, aquella no era una mujer, era un ángel y miro como un ser despreciable abusaba de ella con violencia, descaradamente y después de acabar su labor ruin le dijo al oído – concédeme un hijo varón – Vheilian sintió la impotencia de no poder hacer nada, quería matarlo, destruirlo pero no podía hacer nada estaba inmóvil impotente ante aquel abuso –POR FAVOR LORD VHEILIAN NO PERMITA QUE LE HAGA DAÑO- la voz de aquella mujer le conmovió y tomo la decisión –Rayne preciosa todo estará bien preciosa- dijo con ternura.
-MATALO YA ARLES – Zeus desesperado no dejaba de gritar aquello una y otra vez – MATALO, MATALO MALDITA SEA – Vheilian sintió la fuerza y su cuerpo comenzó a vibrar en contra de aquel poder logro levantar su brazo un poco cada vez mas resistiéndose ante el poder de arles el cual presionaba mas su puño, levanto su mano hasta la altura de la cabeza de arles y movió uno de sus dedos apuntando hacia la cabeza de arles, dio un grito fuerte y vio la mirada de arles, sus ojos abiertos un sonido seco y un rayo de energía oscura impacto la cabeza de arles tirándolo en el suelo como una tabla, Vheilian cayó en el suelo jadeando, cansado sin fuerzas y recuperándose de aquel ataque, noto como un sentimiento de odio se concentraba en el, pudo sentir la mirada iracunda de Zeus y noto el movimiento de su mano hacia un costado y como le lanzaba un rayo, arles se levanto rápidamente y se interpuso entre el rayo y Vheilian mirando de frente a su padre y con los brazos extendidos recibiendo el impacto de aquel rayo –¿QUE DEMONIOS TE PASA PADRE?- grito arles al recibir aquel rayo en su pecho – DIJISTE QUE NO INTERVENDRIAS A FAVOR DE NINGUNO ¿ENTONCES POR QUE HACES ESTO?- Zeus giro su mirada como sin darle mayor importancia a lo que arles le dijo, arles giro en dirección a su amigo, Vheilian aun jadeaba con ambas manos en el suelo y temblando –LEVANTATE- le grito arles, Vheilian se incorporo y le sostuvo la mirada - ¿Cómo? – dijo arles sin terminar la pregunta, agacho su mirada impotente al tiempo que presionaba sus puños, Vheilian le miraba extrañado pero atento ante cualquier movimiento, saco su otra espada y se puso en guardia, un grito mas de Zeus y arles se lanzo al ataque con su puño de frente tratando de impactar el cuerpo de su amigo, Vheilian se agacho girando su cuerpo y levantando el filo de su espada, el filo de la espada entro directo en el estomago de arles, este abrió los ojos al sentir aquel golpe en su estomago tomo la empuñadura de la espada con las manos de Vheilian sobre ella y la encajo más hacia él, golpeo con ambos puños el pecho de Vheilian y lo tomo de los cabellos llevando sus rodillas hasta su cara en repetidas ocasiones, giro el cuerpo de Vheilian y de su cintura saco una espada corta clavándola con firmeza en su espalda, pateo la empuñadura de la espalda y Vheilian cayo de frente golpeando primero la punta de la espada que le había atravesado la cual salió causándole gran dolor sintió como su rostro de lado derecho chocaba con el suelo y como tosió sangre manchando el pasto estaba exhausto, cerro sus ojos y sintió como arles pateaba su espalda con suma violencia, pero también podía sentir el dolor de su amigo, se odio por un instante por causarle ese dolor a su mejor amigo, no tenía sentido seguir luchando, - no se dará por vencido tan fácilmente mi lord – una vos en su interior le hizo sonreír un poco – y menos sabiendo que hizo una promesa a una de sus hijas y yo mismo prometí a lady Carmilla que le cuidaría ¿recuerda? – El recuerdo de Sara conteniendo las lagrimas notablemente preocupada le invadió -¿padre prométeme que regresaras? – la mirada de su pequeña de su linda hija – hermosa volveré lo prometo- la chica ilumino su corazón con una sonrisita y se aferro al pecho de su padre - te amo papi – sintió su ropa humedecerse por las lagrimas de su pequeña –Mi lord permítame pelear – dijo la voz de Neptuno, aquel druida que se había vuelto una parte de, el –Bien Neptuno pelea déjame recuperarme -.
-Bienvenido Mi Hermoso Lord Vampiro- dijo la voz potente de Zeus – Por un momento muchacho pensé que no llegarías – fijaba su vista en Vheilian como si se tratara de un objeto el cual quería poseer a cualquier costo – Estoy aquí Zeus habla ya – dijo Lord Vheilian sin recuperarse aun de aquel flashazo en sus ojos, camino torpemente y cayo serian acaso 3 metros, cayo de bruces al suelo golpeando su rostro en lo que pudo sentir era tierra firme y un delicado pasto cubría la superficie, se levanto rápidamente y distinguió por fin – Esto mi hermoso vampiro son los campos elíseos, un lugar digno para ver tu muerte – lo pudo ver la figura imponente de Zeus en su trono a casi 8 metro de altura inmenso, bajo su mirada, solo para encontrarse con el rostro de su amigo, sus sentidos quedaron paralizados ante la imagen de Arles, el cual le miraba fríamente, su armadura, aquella elijada para esa pelea en especifico era su favorita, una gruesa armadura en oro y detalles en plata, los adornos en el peto eran cientos y cientos de pequeños cráneos, las imponentes hombreras con un grosor impresionante, una abertura en medio de su pecho subía en forma de V hasta su cuello un poco antes de llegar a sus orejas, su casco en oro también con un T en medio que le permitía ver sus ojos, su boca y nariz pero que cubrían perfectamente su rostro, en la punta de aquel casco una línea en oro hasta su espalda adornada con pelo rojo, su amigo Arles camino en dirección a él, era cierto, su corazón lloro de tristeza, al notar los sentimientos de arles – TE PROMETO AMIGO MIO QUE SI ALGO LLEGARA A PASARTE, YO MISMO ME ENCARGARE DE QUE TU FAMILIA ESTE BIEN –ese pensamiento llego a su mente, Arles le miraba frio, pero aquel pensamiento venia de él, había decidido pelear con todo lo que tenía por qué intentar engañar a Zeus seria una tontería, lo mataría si fuera necesario con tal de protegerlo y el sabia mejor que nadie que el amor y devoción por su familia eran el eje de lord Vheilian.
Sus miradas se encontraron una vez más, lord Vheilian llevo sus manos a las empuñaduras de sus espadas esperando una reacción por un largo instante ninguno de los dos pudo moverse – VENGA YA QUE NO TENGO TODA LA VIDA POR DELANTE – dijo Zeus en un tono de burla y divertido por aquella escena – Ho padre, cuan cruel es tu corazón, dudo que tengas uno - la voz de Arles era cancina agobiada por la tarea, una tarea que no quería hacer, fue el primer golpe en su rostro, el casco negro impresionante de lord Vheilian se partió en dos dejando su rostro al descubierto, se tambaleo hacia atrás sin poder evitarlo lanzo su cabeza hacia enfrente para encontrase de lleno con el cráneo de arles el cual asestaba un golpe brutal a su abdomen, no podía, no quería hacerlo, golpear a su amigo era más de lo que Arles podía aguantar.
Vheilian sintió aquel golpe en su abdomen y sintió como el aire salió de su cuerpo, haciendo acopio de fuerzas salto tremenda patada directo al peto de arles, este por la potencia de aquel impacto giro su cuerpo golpeando con los nudillos envueltos en oro en la mejilla de Vheilian el cual sintió como un corte se abría en su mejilla llevo sus manos al rostro y miro sus dedos – venga ya arles ¿Por qué siempre tienes que hacerme sangrar primero- dijo Vheilian divertido, arles soltó algo parecido a una carcajada, esa distracción fue aprovechada magistralmente por Vheilian el cual se lanzo sobre el, justo enfrente de, el dio un salto de 360 grados estirando sus manos en la cabeza de arles y tomando su casco arrancándolo con violencia, Vheilian al caer al suelo lanza su cuerpo hacia atrás chocando con la nuca de arles, su cuerpo es detenido por la espalda de este, en un giro rápido arles toma por los cabellos a Vheilian, levantándolo de un rodillazo seco a su estomago y golpeando una vez más su rostro –EN LA CARA NO QUE DE ESO VIVO!- dijo Vheilian riendo a carcajadas, arles no pudo evitarlo y se hecho a reír también Vheilian proyecto su ante brazo con violencia al rostro de arles, un impacto brutal y un corte en su cara, pudo ver entonces su sangre – Hey amigo ¿acaso tú no eres el que dice que la venganza es mala? – aquello aquel momento los dos habían encontrado aun en ese instante el motivo por el cual sus corazones se habían unido, arles se lanzo sobre el brazo de Vheilian este al tener una armadura menos pesada y tosca pudo gira y patear las costillas de arles y lanzarse al ataque una vez mas esta vez sobre su cabeza tomando con ambas manos en un salto y golpeando su rostro con su rodilla, arles divertido llevo ambas manos a su nariz la risa le diversión que le provoco la reacción de su cuerpo ante el impacto de Vheilian fue algo que al mismo tiempo sorprendió a Vheilian –ttt-tu jajajaja amigo mío es la segunda vez que me haces sangrar en una lucha esto es un record – pudo ver la luz en arles, en ese momento no podía ser más feliz y ambos se sumergieron en un instante mágico, Zeus miraba absorto la escena, aquella pelea entre dos amigos, arles partió en dos el peto de la armadura de Vheilian, este al notar el peso y protección de arles se acerco rápidamente poniendo las palmas de sus manos en la armadura de arles y soportando la presión en sus costillas por un abrazo que le propinaba este, incendio sus manos y he hizo que el aire alrededor de ambos se calentara, de la armadura de arles comenzó a salir humo un grito de dolor fue escondido por la risa de arles el cual lanzo lejos a su amigo y quito con desesperación el peto de su cuerpo dejando ver su piel algo enrojecida por el calor, ambos se miraban Vheilian con sus manos en sus rodillas jadeando tratando de tomar fuerzas sin dejar de sonreír, con sus manos en la cintura dando profundas bocanadas de aire entre jadeaos arles dijo algo que apenas se entendió – Am a amigo mi mío cuan fu fuerte te has vuelto – Vheilian sonrió una vez mas y noto el estado de su cuerpo si bien estaba lastimado lo cierto era que solo eran golpes y moratones – tuve un maestro estupendo arles – dijo Vheilian también jadeando y sin dejar de reir, ambos se miraban con admiración y amor, era esa manera de hacer las cosas las que se convirtieron en el detonante de su amistad, aquella unión tan extraña era inevitable.
-BASTA YA DE JUEGOS ESTUPIDOS- Vheilian en su mente escucho gritos y sonidos de terror en su mente se quedo en shock al mirar la escena en su mente su castillo en llamas sus hijas gritando, todo lo que amaba estaba en peligro, fue sacado de aquella visión por un corte en su pecho, arles le miraba con su espada en el suelo sangrante y lagrimas en sus ojos, Vheilian miro su pecho un corte decencia de su hombro izquierdo hasta su costado derecho y sangraba pero era superficial aun que amplio, por un momento no supo qué hacer, su mente era un mar de sensaciones, sabía que se habían perdido en la emoción que era pelear entre ellos dos, un golpe en su quijada con el mango de la espada de arles lo puso en alerta rápidamente saco su espada y se lanzo sobre su amigo en un grito de dolor que desgarro la calma de aquel lugar la espada se encajo con violencia en el hombro izquierdo de arles dio un giro a su espada y la saco con violencia pateando el estomago de su amigo – PERDONAME VHEILIAN- dijo arles entre sollozos, estiro su mano en dirección a Vheilian y presiono su puño con fuerza, Vheilian sintió su cuerpo estremecerse el dolor invadió su mente y noto como su cuerpo se levantaba ligeramente del suelo en un intento por resistirse aquel control grito tan fuerte que arles bajo la presión en su puño pero fue motivado por un grito de Zeus –ACABALO YA MALDITA SEA – su cuerpo gritaba de dolor ante aquella muestra de poder de arles, sentía sus músculos tensarse por aquel poder impresionante, arles no dejaba de sollozar –perdóname amigo, perdóname Vheilian- en ese instante en su mente surgió un recuerdo.
Aquella noche presa del aburrimiento salió a la ciudad, era una noche fría y la luna brillaba llena y hermosa, entonces noto una figura, era un chica temblorosa la cual recorría aquel muro tratando de mantenerse de pie, el shock en aquella chica era evidente, golpeo su cuerpo y levanto su vista clavando su mirada en la de él, aquella mirada, aquel instante en que pudo ver dentro de su alma, un grito de auxilio en aquel silencio pudo sentir en su alma -¿Estás Bien? – pregunto estúpidamente Vheilian al salir de la profundidad de la mirada de la chica, aquella no respondió, todo su cuerpo temblaba, hizo lo que parecería una locura la abrazo y le hizo una promesa al tiempo que desapareció de ese lugar con la chica en brazos temblando y sin decir una palabra proyecto su mente en ese lugar quesería propicio para aquel encuentro noto la cima de aquella montaña, uno de sus lugares favoritos, en la cima solo un árbol, hermoso y con las hojas de este cayendo, la luz de la luna aumento más la belleza de aquella chica, aun con ella en brazos se recargo en el árbol dejándose caer y protegiendo con sus manos su cabeza le pregunto entre susurros - ¿Cuál es tu nombre?- la chica hizo acopio de fuerzas – Mi nombre es rayne – el cuerpo de Vheilian entro en shock y una visión invadió su mente, el cuerpo de una bella mujer sin un brazo y sangrante le miraba fijamente, aquella mujer no movió su boca pero pudo escuchar su voz en su corazón – Lord Vheilian, te conozco sé quién eres, por favor ayúdala, no permitas que le haga daño, una escena más invadió su mente, aquella no era una mujer, era un ángel y miro como un ser despreciable abusaba de ella con violencia, descaradamente y después de acabar su labor ruin le dijo al oído – concédeme un hijo varón – Vheilian sintió la impotencia de no poder hacer nada, quería matarlo, destruirlo pero no podía hacer nada estaba inmóvil impotente ante aquel abuso –POR FAVOR LORD VHEILIAN NO PERMITA QUE LE HAGA DAÑO- la voz de aquella mujer le conmovió y tomo la decisión –Rayne preciosa todo estará bien preciosa- dijo con ternura.
-MATALO YA ARLES – Zeus desesperado no dejaba de gritar aquello una y otra vez – MATALO, MATALO MALDITA SEA – Vheilian sintió la fuerza y su cuerpo comenzó a vibrar en contra de aquel poder logro levantar su brazo un poco cada vez mas resistiéndose ante el poder de arles el cual presionaba mas su puño, levanto su mano hasta la altura de la cabeza de arles y movió uno de sus dedos apuntando hacia la cabeza de arles, dio un grito fuerte y vio la mirada de arles, sus ojos abiertos un sonido seco y un rayo de energía oscura impacto la cabeza de arles tirándolo en el suelo como una tabla, Vheilian cayó en el suelo jadeando, cansado sin fuerzas y recuperándose de aquel ataque, noto como un sentimiento de odio se concentraba en el, pudo sentir la mirada iracunda de Zeus y noto el movimiento de su mano hacia un costado y como le lanzaba un rayo, arles se levanto rápidamente y se interpuso entre el rayo y Vheilian mirando de frente a su padre y con los brazos extendidos recibiendo el impacto de aquel rayo –¿QUE DEMONIOS TE PASA PADRE?- grito arles al recibir aquel rayo en su pecho – DIJISTE QUE NO INTERVENDRIAS A FAVOR DE NINGUNO ¿ENTONCES POR QUE HACES ESTO?- Zeus giro su mirada como sin darle mayor importancia a lo que arles le dijo, arles giro en dirección a su amigo, Vheilian aun jadeaba con ambas manos en el suelo y temblando –LEVANTATE- le grito arles, Vheilian se incorporo y le sostuvo la mirada - ¿Cómo? – dijo arles sin terminar la pregunta, agacho su mirada impotente al tiempo que presionaba sus puños, Vheilian le miraba extrañado pero atento ante cualquier movimiento, saco su otra espada y se puso en guardia, un grito mas de Zeus y arles se lanzo al ataque con su puño de frente tratando de impactar el cuerpo de su amigo, Vheilian se agacho girando su cuerpo y levantando el filo de su espada, el filo de la espada entro directo en el estomago de arles, este abrió los ojos al sentir aquel golpe en su estomago tomo la empuñadura de la espada con las manos de Vheilian sobre ella y la encajo más hacia él, golpeo con ambos puños el pecho de Vheilian y lo tomo de los cabellos llevando sus rodillas hasta su cara en repetidas ocasiones, giro el cuerpo de Vheilian y de su cintura saco una espada corta clavándola con firmeza en su espalda, pateo la empuñadura de la espalda y Vheilian cayo de frente golpeando primero la punta de la espada que le había atravesado la cual salió causándole gran dolor sintió como su rostro de lado derecho chocaba con el suelo y como tosió sangre manchando el pasto estaba exhausto, cerro sus ojos y sintió como arles pateaba su espalda con suma violencia, pero también podía sentir el dolor de su amigo, se odio por un instante por causarle ese dolor a su mejor amigo, no tenía sentido seguir luchando, - no se dará por vencido tan fácilmente mi lord – una vos en su interior le hizo sonreír un poco – y menos sabiendo que hizo una promesa a una de sus hijas y yo mismo prometí a lady Carmilla que le cuidaría ¿recuerda? – El recuerdo de Sara conteniendo las lagrimas notablemente preocupada le invadió -¿padre prométeme que regresaras? – la mirada de su pequeña de su linda hija – hermosa volveré lo prometo- la chica ilumino su corazón con una sonrisita y se aferro al pecho de su padre - te amo papi – sintió su ropa humedecerse por las lagrimas de su pequeña –Mi lord permítame pelear – dijo la voz de Neptuno, aquel druida que se había vuelto una parte de, el –Bien Neptuno pelea déjame recuperarme -.
jueves, 27 de enero de 2011
ÚLTIMO CAPÍTULO DEL ÁNGEL DE LA MUERTE
CAPÍTULO 7
Cuando abrí los ojos, aún estaba en los brazos de Lord Vheilian y recuerdo que una densa niebla nos abrazaba a ambos con su gélido aliento, no obstante estaba protegida a pesar de que aquel hombre poseía una naturaleza demoníaca, monstruosa a los ojos humanos. Levanté la mirada por encima de mis porpios hombros, observé que estabamos traspasándo un denso bosque a pie, los inmensos árboles cubrían el camino que ascendía a la montaña y la luna, en lo más alto del cielo era lo único que alumbraría las enredaderas ramas de la naturaleza, pero Lord Vheilian no necesitaba alumbramiento, ni tan siquiera precisaba de sus conocimientos para saber por dónde debía pisar, pues su visión era brillante como si una mañana clareada se tratase, veía perfectamente los requicios del camino, flaqueando agilmente una rama torcida o una raíz desenterrada o una piedra que había caído en un alud improvisado. "¿Ya has despertado pequeña?" observé aquellos ojos que no se detuvieron en observarme. Noté como el hombre saltaba por una pared rocosa, el campo de visión no me permitía ver más pues él había cerrado sus brazos a mi alrededor para evitar que me cayese. Llegamos a la cima de una de las montañas que logré ver momentos antes, y en dónde un único árbol había crecido a pesar de la textura rocosa del lugar, Lord Vheilian se acomodó bajo las ramas conmigo en sus regazos, bajo una lluvia de pétalos rojas que caían de las ramas del árbol. "Dime pequeña, ¿Qué dolor aflige ese corazón? ¿Cuál es tu nombre?" sentí como si algo quisiera entrar en mi mente, noté como si unos dedos indagase en mi materia gris y derepente, ví como Vheilian entraba en un estado de shock o en letargo prematuro, en ese momento no quise interferír sabía que lo que le sucedía le debía pasar estaba escrito que así fuese y mientras tanto me quedé allí llorándo, desquitádome e intentándo aflorar el intenso dolor que me afligía las muertes de todas aquellas personas a las que amaba. Cuando Vheilian volvió en sí, sentí que había llegado el momento, el momento en el que formaría parte de aquel ser y me sentí dichada. Tan sólo bastó una palabra para que mi mente enterrase todos mis recuerdos, una palabra que me salvaría de aquella locura de terror y muerte, una palabra que me otorgaría un nuevo comienzo y esa palabra fue, dicha por los labios de mi sire "hija" "Te amo hija, volvamos a casa, tus hermanas te esperan" me aferré a su pecho ya con mi nueva naturaleza sanguinaría y una mirada carmesí como las de mi padre y le dí la bienvenida aquella noche a mi nueva no-vida.
"¿Sabes acaso quién eres? Pues YO te lo diré.... ¡Eres mi hija!" ¿cómo su hija? ¿de qué demonios me estaba hablándo? pensé mirándole con odio "Rayne, es hora de que conozcas la historia..." Cuando tube la visión de cómo aquel maldito ser tomaba y violaba a mi madre biológica sentí que algo moría en mi interior, me levanté consumida por una locura y en ese momento recuperé los recuerdos de mi vida mortal, de cómo aquel demonio había matado a mis seres amados por ansías de arrebatarme lo que amaba, ¿por qué? pensaba, si era mi padre, ¿por qué acabar de aquella manera con la felicidad de su hija? no lo comprendía por mucho que lo pensara.. "mi dulce ángel, más te vale concevirme un hijo varón" aquellas palabras vinierón a mi mente como un duro golpe, ¿acaso todas las muertes era su manera de cobrarse que yo no hubiese nacido varón? llegué hasta él sin que me lo impidiese, bloqueé su cuerpo y comenzé a golpeárle con las cuchillas, le desmembrené los brazos, le corté el cuello haciendo que su cabeza cayese al suelo con un rostro de sorpresa fingida, su cuerpo cayó con todo el peso al suelo y la sangre pronto tiñó el color de la fría piedra bajo mis pies. Respiré entre cortadamente mientras me puse en camino hasta llegar a XXDIABOLOXXX me agaché para tomar su cabeza, y abrazarle con una extraña sensación, todo había acabado pero intuía que eso no era así, no lo era, había sido demasiado fácil. Sin percatárme, la sangre de Nefistófeles empezó a recogerse retomándo nuevamente reorganizándose, el cuerpo se iba incorporándo mientras terminaba de reformarse nuevamente y una risa macabra resonó en toda la habitación haciendo que me llevase las manos a los oídos en un impulso incosciente. Giré mi rostro y lo que ví me llenó de terror, Nefistófeles no sólo se había reformado sino que su aspecto era la misma imagen real de su naturaleza, una especie de araña gigante con tronco de hombre y cabeza de macho cabrío, en su espalda le colgaban tentáculos y unas alas de murciélago, sus ojos estaban consumidos por una densa oscuridad. Aquella cosa se acercó a mí y con una de sus patas lanzó mi cuerpo cual muñeca de trapo hasta que una pared me detuvo, caí al suelo, Nefistófeles volvió a acercarse y ésta vez me clavó otra de sus patas en el muslo, el grito que surgió al sentir aquel dolor se pudo oír en cualquier rincón de aquel reino. Aquello le divertía al demonio que no paraba de reír, liberó mi muslo para así atraparme con sus tentáculos, me levantó sin esfuerzo ya que debido a la diferencia de tamaño era considerable, hacía además de querer deborarme pero lo único que hacía era hecharme su pestilente aliento y seguía jugando con mi cuerpo a su entero antojo, me atravesaba los brazos, las piernas y el vientre con aquellos tentáculos, sentía desvanecer por el dolor y mis ojos no dejaban de mirar a mi amado y con lágrimas en los ojos por sentirme inutil y haber llevado hasta la muerte a mi amor y a mí misma sin siquiera haberme despedido de mi familia o decírles que les amaba... Nefistófeles adquirió su tamaño normal o lo que se podría considerar normal, o dicho de éste modo, un tamaño mortal pero sin perder la imagén de araña, seguía aprisionándome con sus tentáculos; uno me rodeaba el cuello, otros las muñecas y otros dos forzejearón hasta abrirme las piernas y otros dos más me arrancarón la armadura como si papel se tratase dejándome desnuda. Dos tentáculos más se aferrarón a mis pechos jugándo con ellos y palpándolos, mi "padre" gozaba verlos contonearse al movimiento y como temblaban para volver a su estado normal, yo gritaba y aclamaba en chillidos clemencia y piedad, fieramente deseé que parase, otro tentáculo comenzó a acariciarme la entrepierna. "¡Oh! pero si eres una guarra hija mía.... jajajajajajaja.... mírate, humedecida por tu propio padre jajajajajajaja", "¡BASTA!", mi amado en ese momento abrió los ojos y a mí se me cayó el alma a los pies cuando descubrió la escena que estaba viviéndo, leí en sus labios como me nombraba y volví a gritar "¡BASTA!", sentía que iba a caer en cualquier momento, pero Nefistófeles no lo permitiría, no al menos de momento, antes disfrutaría viéndome sufrir al ser violada delante de mi prometido a las puertas de la misma muerte "¡BASTAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!"
Mi mente cayó en una densa oscuridad, pero a pesar de ello me sentía en paz, nada me dolía, mi cuerpo estaba entero aunque desnudo y ví como una bellísima luz delante de mí se hacía efímera y de aquella luz celestial, la imagén de una hermosa mujer tomó forma, supe quien era nada más verla y corrí a abrazarla sin pensar, "mamá" susurré y mis ojos humedecierón derramando lágrimas de dolor y felicidad al mismo tiempo, "Rayne, mi preciosa Rayne...." la mujer me acarició los cabellos respondiendo a mi abrazo, "Rayne, no permitas que haga contigo como hizo conmigo, no lo permitas o mi vida habrá sido en vano, mi sufrimiento, mi lucha, mi causa... todo y no sólo de mí hablo mi preciosa niña" mi mente viajó durante un instante a través de la dureza de las capas de la tierra, viajó a través de la distancia y llegar hasta el castillo de Sagara, ví a mis hermanos y a mis padres, en aquella visión también pude verme a mí misma el primer día que llegue a casa en brazos de mi padre. En aquella visión pude ver como mi padre me daba a conocer dándo la noticia de que un nuevo miembro en la familia había llegado y pude ver como los brazos de mis hermanos y de mi madre se cernían sobre mí en una cariñosa bienvenida y también ví las miradas de complicidad entre mi madre BabyMetal y mi padre Vheilian acabándo con un dulce beso de triunfo familiar. "Mi preciosa Rayne, no lo olvides, ahora que ya lo sabes... no permitas que cause más daño a los seres que no merecen la pena y el sufrimiento, tú misma vivístes lo que el dolor puede causar, no permitas que se salga con la suya, mi dulce niña tú lo llevas en tu interio aprovecha el don y la maldición de ser quien eres, eres el ángel de la muerte, destruye a aquel que te dió la vida" abrí de golpe mis ojos clavándo una mirada en los ojos sin vida de aquel monstruo que estaba a punto de penetrarme, en su rostro se dibujó una sorpresa ahogada y su risa había desaparecido "¡Alatariel! pero... ¿Cómo es posibl...?" mi cuerpo comenzó a brillar con un destello celestial quemando y evaporizándo los tentáculos que me retenían, los gritos de Nefistófeles eran ensordecedor, no obstante seguía mirándome perplejo, mis ojos se tiñerón de un color azul cielo de una mañana clara y mis cabellos se volvierón blancos como la pureza misma, en mi espalda nacierón dos hermosas alas que cubrieron mi cuerpo y permitiéndome mantenerme suspendida en el aire, mi piel pálida por la muerte retomarón su color natural dorado y rosado al mismo tiempo y una sonrisa se dibujó en mis labios, una palabra surgió de ellos "Iluminatum" y el brillo de mi cuerpo se hizo más denso llenándo todo el recinto de luz y calor, Nefistófeles no cesaba de gritar sin comprender qué estaba pasándo, aquella luz le estaba quemándo los ojos "¡Basta maldita asquerosa, necíaaa!" con sus brazos de humano procuraba golpear al aire intentándo alcanzarme pero fue en vano, la luz y el dolor le impedía visualizar. Alzé mis manos y un cetro surgió de la nada ocupándo las palmas de mi manos, que éstas se cerrarón tomándolo con fuerza y otorgándo un golpe cortánte al aire en dirección a Nefistófeles logré realizar un corte desde el hombro izquierdo hasta la cadera derecha abriéndolo como un libro. Éste antes de consumirse en su propia locura entre chillidos, visualizó detrás de mí la imágen de mi madre que al igual que yo, se aferraba al mismo cetro y vió como una sonrisa calurosa y orgullo por estar allí viéndolo sufrir a manos de su propia hija, el ser que él mismo había concevido a través del dolor, la sangre, el odio y la violación, "M-m-maldit..." dijo por último antes de que su propia sangre, del color de la noche le consumiera como un potente químico dejándo sólo un órgano palpitante en el suelo, un trozo de lo que parecía un trozo de carbón, dí un golpe con la punta del cetro en el suelo y una honda eléctrica surcó el piso quemándo aquel órgano convirtiéndolo en cenizas. Mi cuerpo cayó al suelo agotado por toda la energía gastada, mi respiración era tan sólo un hilo, XXDIABOLOXXX ejerciéndo fuerza como pudo, logró liberarse de las cadenas que le tenían preso rompiéndolas, o quizás el verme entre la no-vida y la muerte definitiva le otorgarón la fuerza necesaria para ello o quizás la liberación del poder que le tenía preso, no lo sabría al cien por cien, pero el caso es que corrió hasta mi encuentro y... mi mente y mi cuerpo cayeron en un letargo de autocuración, lo único que logré captar antes de sucumbir en la oscuridad fue sus palabras, "amor mío, resiste".
El brillo de la luna bañaba mi cuerpo como cada noche, abrí los ojos y saludé como de costumbre "Eternas lunas diosa de la oscuridad", incorporé mi cuerpo trabajosamente, me dolía todas las costillas, no lograba sentir muchos puntos de mi cuerpo y otros tanto me dolían a morir, pero al menos habría logrado despertar una noche más, ví a mi hermana Sara recostada en uno de los sillones que había en mi habitación, habría estado conmigo noche trás noche desde mi regreso, otorgándome energía y curación a mis heridas para intentar salvarme que aún no había despertado trás ocultárse el sol. Abrí la puerta en silencio, salí al corredor sujetándome a la pared. Bajé las escaleras y la primera persona con la que me topé, fue la misma persona que me vió en esa misma postura tambaleante a punto de caer en cualquier momento, y mis ojos se volvieron a cruzar como la vez primera, "papi...." no pude soportárlo más, corrí como pude hasta él, él me detuvo precipitándose a tomar mi cuerpo en un abrazo, me acarició la cabeza alborotando mis cabellos "hija mía de mí, por el padre oscuro muchacha, no nos vuelvas a asustar de ésta manera" intentaba contener las lágrimas, y no paraba de besarme las mejillas y la frente a pesar de que me quejaba por el dolor y honestamente, nunca hubiese querido que dejase de hacerlo, a pesar del dolor que mi cuerpo sentía, el calor y el cariño de mi familia era lo que más precisaba en ese momento. Al escuchar a Vheilian, más miembros de la familia; hermanos, tías, abuela, fueron llegando para recibirme y preguntar cómo estaba... Durante la noche, había llegado un momento en el que necesitaba salir al exterior y recibir directamente sobre mi piel los rayos de la luna sobre mi piel, salí a la balconera, mi padre había dado ordén de que me dejasen tranquila y no me atosigaran a preguntas, por lo que me permitieron salir sóla, sin tampoco apartar las miradas. Allí estaba él, esperando encontrarme un momento a solas para dejarse ver, me tomó en sus brazos, su mano me levantó la barbilla para aproximar mis labios a los suyos y acabar fundiéndonos en un beso apasionado, sus brazos se aferrarón a mi cuerpo. Sus labios se alejó unos centímetros de los míos, lo justo para que sus ojos se encontrarán con los míos "Te amo, te amo, te amo.... eres una loca, te dije que no fueras.... pero aún así, graciassss" sonreí "es lo menos que podría hacer por mi prometido, ¿No?" ahora fue él quien sonrió y nuestros labios volvieron a fundirse en un juego de pasión. -FIN-
._.U por fin acabé..... espero haya sido de vuestro agrado ésta historia y que además os sirva para comprender un poquito más a la alocada de xRaynexBlood x'DDD Para todos vosotros familia, disfrútenlo y sino, borrénlo xDD mejor no, me mandaís una copia antes XDDD Eternas lunas y recordárlo, os amo a todooooooooooooooooos
Cuando abrí los ojos, aún estaba en los brazos de Lord Vheilian y recuerdo que una densa niebla nos abrazaba a ambos con su gélido aliento, no obstante estaba protegida a pesar de que aquel hombre poseía una naturaleza demoníaca, monstruosa a los ojos humanos. Levanté la mirada por encima de mis porpios hombros, observé que estabamos traspasándo un denso bosque a pie, los inmensos árboles cubrían el camino que ascendía a la montaña y la luna, en lo más alto del cielo era lo único que alumbraría las enredaderas ramas de la naturaleza, pero Lord Vheilian no necesitaba alumbramiento, ni tan siquiera precisaba de sus conocimientos para saber por dónde debía pisar, pues su visión era brillante como si una mañana clareada se tratase, veía perfectamente los requicios del camino, flaqueando agilmente una rama torcida o una raíz desenterrada o una piedra que había caído en un alud improvisado. "¿Ya has despertado pequeña?" observé aquellos ojos que no se detuvieron en observarme. Noté como el hombre saltaba por una pared rocosa, el campo de visión no me permitía ver más pues él había cerrado sus brazos a mi alrededor para evitar que me cayese. Llegamos a la cima de una de las montañas que logré ver momentos antes, y en dónde un único árbol había crecido a pesar de la textura rocosa del lugar, Lord Vheilian se acomodó bajo las ramas conmigo en sus regazos, bajo una lluvia de pétalos rojas que caían de las ramas del árbol. "Dime pequeña, ¿Qué dolor aflige ese corazón? ¿Cuál es tu nombre?" sentí como si algo quisiera entrar en mi mente, noté como si unos dedos indagase en mi materia gris y derepente, ví como Vheilian entraba en un estado de shock o en letargo prematuro, en ese momento no quise interferír sabía que lo que le sucedía le debía pasar estaba escrito que así fuese y mientras tanto me quedé allí llorándo, desquitádome e intentándo aflorar el intenso dolor que me afligía las muertes de todas aquellas personas a las que amaba. Cuando Vheilian volvió en sí, sentí que había llegado el momento, el momento en el que formaría parte de aquel ser y me sentí dichada. Tan sólo bastó una palabra para que mi mente enterrase todos mis recuerdos, una palabra que me salvaría de aquella locura de terror y muerte, una palabra que me otorgaría un nuevo comienzo y esa palabra fue, dicha por los labios de mi sire "hija" "Te amo hija, volvamos a casa, tus hermanas te esperan" me aferré a su pecho ya con mi nueva naturaleza sanguinaría y una mirada carmesí como las de mi padre y le dí la bienvenida aquella noche a mi nueva no-vida.
"¿Sabes acaso quién eres? Pues YO te lo diré.... ¡Eres mi hija!" ¿cómo su hija? ¿de qué demonios me estaba hablándo? pensé mirándole con odio "Rayne, es hora de que conozcas la historia..." Cuando tube la visión de cómo aquel maldito ser tomaba y violaba a mi madre biológica sentí que algo moría en mi interior, me levanté consumida por una locura y en ese momento recuperé los recuerdos de mi vida mortal, de cómo aquel demonio había matado a mis seres amados por ansías de arrebatarme lo que amaba, ¿por qué? pensaba, si era mi padre, ¿por qué acabar de aquella manera con la felicidad de su hija? no lo comprendía por mucho que lo pensara.. "mi dulce ángel, más te vale concevirme un hijo varón" aquellas palabras vinierón a mi mente como un duro golpe, ¿acaso todas las muertes era su manera de cobrarse que yo no hubiese nacido varón? llegué hasta él sin que me lo impidiese, bloqueé su cuerpo y comenzé a golpeárle con las cuchillas, le desmembrené los brazos, le corté el cuello haciendo que su cabeza cayese al suelo con un rostro de sorpresa fingida, su cuerpo cayó con todo el peso al suelo y la sangre pronto tiñó el color de la fría piedra bajo mis pies. Respiré entre cortadamente mientras me puse en camino hasta llegar a XXDIABOLOXXX me agaché para tomar su cabeza, y abrazarle con una extraña sensación, todo había acabado pero intuía que eso no era así, no lo era, había sido demasiado fácil. Sin percatárme, la sangre de Nefistófeles empezó a recogerse retomándo nuevamente reorganizándose, el cuerpo se iba incorporándo mientras terminaba de reformarse nuevamente y una risa macabra resonó en toda la habitación haciendo que me llevase las manos a los oídos en un impulso incosciente. Giré mi rostro y lo que ví me llenó de terror, Nefistófeles no sólo se había reformado sino que su aspecto era la misma imagen real de su naturaleza, una especie de araña gigante con tronco de hombre y cabeza de macho cabrío, en su espalda le colgaban tentáculos y unas alas de murciélago, sus ojos estaban consumidos por una densa oscuridad. Aquella cosa se acercó a mí y con una de sus patas lanzó mi cuerpo cual muñeca de trapo hasta que una pared me detuvo, caí al suelo, Nefistófeles volvió a acercarse y ésta vez me clavó otra de sus patas en el muslo, el grito que surgió al sentir aquel dolor se pudo oír en cualquier rincón de aquel reino. Aquello le divertía al demonio que no paraba de reír, liberó mi muslo para así atraparme con sus tentáculos, me levantó sin esfuerzo ya que debido a la diferencia de tamaño era considerable, hacía además de querer deborarme pero lo único que hacía era hecharme su pestilente aliento y seguía jugando con mi cuerpo a su entero antojo, me atravesaba los brazos, las piernas y el vientre con aquellos tentáculos, sentía desvanecer por el dolor y mis ojos no dejaban de mirar a mi amado y con lágrimas en los ojos por sentirme inutil y haber llevado hasta la muerte a mi amor y a mí misma sin siquiera haberme despedido de mi familia o decírles que les amaba... Nefistófeles adquirió su tamaño normal o lo que se podría considerar normal, o dicho de éste modo, un tamaño mortal pero sin perder la imagén de araña, seguía aprisionándome con sus tentáculos; uno me rodeaba el cuello, otros las muñecas y otros dos forzejearón hasta abrirme las piernas y otros dos más me arrancarón la armadura como si papel se tratase dejándome desnuda. Dos tentáculos más se aferrarón a mis pechos jugándo con ellos y palpándolos, mi "padre" gozaba verlos contonearse al movimiento y como temblaban para volver a su estado normal, yo gritaba y aclamaba en chillidos clemencia y piedad, fieramente deseé que parase, otro tentáculo comenzó a acariciarme la entrepierna. "¡Oh! pero si eres una guarra hija mía.... jajajajajajaja.... mírate, humedecida por tu propio padre jajajajajajaja", "¡BASTA!", mi amado en ese momento abrió los ojos y a mí se me cayó el alma a los pies cuando descubrió la escena que estaba viviéndo, leí en sus labios como me nombraba y volví a gritar "¡BASTA!", sentía que iba a caer en cualquier momento, pero Nefistófeles no lo permitiría, no al menos de momento, antes disfrutaría viéndome sufrir al ser violada delante de mi prometido a las puertas de la misma muerte "¡BASTAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA!"
Mi mente cayó en una densa oscuridad, pero a pesar de ello me sentía en paz, nada me dolía, mi cuerpo estaba entero aunque desnudo y ví como una bellísima luz delante de mí se hacía efímera y de aquella luz celestial, la imagén de una hermosa mujer tomó forma, supe quien era nada más verla y corrí a abrazarla sin pensar, "mamá" susurré y mis ojos humedecierón derramando lágrimas de dolor y felicidad al mismo tiempo, "Rayne, mi preciosa Rayne...." la mujer me acarició los cabellos respondiendo a mi abrazo, "Rayne, no permitas que haga contigo como hizo conmigo, no lo permitas o mi vida habrá sido en vano, mi sufrimiento, mi lucha, mi causa... todo y no sólo de mí hablo mi preciosa niña" mi mente viajó durante un instante a través de la dureza de las capas de la tierra, viajó a través de la distancia y llegar hasta el castillo de Sagara, ví a mis hermanos y a mis padres, en aquella visión también pude verme a mí misma el primer día que llegue a casa en brazos de mi padre. En aquella visión pude ver como mi padre me daba a conocer dándo la noticia de que un nuevo miembro en la familia había llegado y pude ver como los brazos de mis hermanos y de mi madre se cernían sobre mí en una cariñosa bienvenida y también ví las miradas de complicidad entre mi madre BabyMetal y mi padre Vheilian acabándo con un dulce beso de triunfo familiar. "Mi preciosa Rayne, no lo olvides, ahora que ya lo sabes... no permitas que cause más daño a los seres que no merecen la pena y el sufrimiento, tú misma vivístes lo que el dolor puede causar, no permitas que se salga con la suya, mi dulce niña tú lo llevas en tu interio aprovecha el don y la maldición de ser quien eres, eres el ángel de la muerte, destruye a aquel que te dió la vida" abrí de golpe mis ojos clavándo una mirada en los ojos sin vida de aquel monstruo que estaba a punto de penetrarme, en su rostro se dibujó una sorpresa ahogada y su risa había desaparecido "¡Alatariel! pero... ¿Cómo es posibl...?" mi cuerpo comenzó a brillar con un destello celestial quemando y evaporizándo los tentáculos que me retenían, los gritos de Nefistófeles eran ensordecedor, no obstante seguía mirándome perplejo, mis ojos se tiñerón de un color azul cielo de una mañana clara y mis cabellos se volvierón blancos como la pureza misma, en mi espalda nacierón dos hermosas alas que cubrieron mi cuerpo y permitiéndome mantenerme suspendida en el aire, mi piel pálida por la muerte retomarón su color natural dorado y rosado al mismo tiempo y una sonrisa se dibujó en mis labios, una palabra surgió de ellos "Iluminatum" y el brillo de mi cuerpo se hizo más denso llenándo todo el recinto de luz y calor, Nefistófeles no cesaba de gritar sin comprender qué estaba pasándo, aquella luz le estaba quemándo los ojos "¡Basta maldita asquerosa, necíaaa!" con sus brazos de humano procuraba golpear al aire intentándo alcanzarme pero fue en vano, la luz y el dolor le impedía visualizar. Alzé mis manos y un cetro surgió de la nada ocupándo las palmas de mi manos, que éstas se cerrarón tomándolo con fuerza y otorgándo un golpe cortánte al aire en dirección a Nefistófeles logré realizar un corte desde el hombro izquierdo hasta la cadera derecha abriéndolo como un libro. Éste antes de consumirse en su propia locura entre chillidos, visualizó detrás de mí la imágen de mi madre que al igual que yo, se aferraba al mismo cetro y vió como una sonrisa calurosa y orgullo por estar allí viéndolo sufrir a manos de su propia hija, el ser que él mismo había concevido a través del dolor, la sangre, el odio y la violación, "M-m-maldit..." dijo por último antes de que su propia sangre, del color de la noche le consumiera como un potente químico dejándo sólo un órgano palpitante en el suelo, un trozo de lo que parecía un trozo de carbón, dí un golpe con la punta del cetro en el suelo y una honda eléctrica surcó el piso quemándo aquel órgano convirtiéndolo en cenizas. Mi cuerpo cayó al suelo agotado por toda la energía gastada, mi respiración era tan sólo un hilo, XXDIABOLOXXX ejerciéndo fuerza como pudo, logró liberarse de las cadenas que le tenían preso rompiéndolas, o quizás el verme entre la no-vida y la muerte definitiva le otorgarón la fuerza necesaria para ello o quizás la liberación del poder que le tenía preso, no lo sabría al cien por cien, pero el caso es que corrió hasta mi encuentro y... mi mente y mi cuerpo cayeron en un letargo de autocuración, lo único que logré captar antes de sucumbir en la oscuridad fue sus palabras, "amor mío, resiste".
El brillo de la luna bañaba mi cuerpo como cada noche, abrí los ojos y saludé como de costumbre "Eternas lunas diosa de la oscuridad", incorporé mi cuerpo trabajosamente, me dolía todas las costillas, no lograba sentir muchos puntos de mi cuerpo y otros tanto me dolían a morir, pero al menos habría logrado despertar una noche más, ví a mi hermana Sara recostada en uno de los sillones que había en mi habitación, habría estado conmigo noche trás noche desde mi regreso, otorgándome energía y curación a mis heridas para intentar salvarme que aún no había despertado trás ocultárse el sol. Abrí la puerta en silencio, salí al corredor sujetándome a la pared. Bajé las escaleras y la primera persona con la que me topé, fue la misma persona que me vió en esa misma postura tambaleante a punto de caer en cualquier momento, y mis ojos se volvieron a cruzar como la vez primera, "papi...." no pude soportárlo más, corrí como pude hasta él, él me detuvo precipitándose a tomar mi cuerpo en un abrazo, me acarició la cabeza alborotando mis cabellos "hija mía de mí, por el padre oscuro muchacha, no nos vuelvas a asustar de ésta manera" intentaba contener las lágrimas, y no paraba de besarme las mejillas y la frente a pesar de que me quejaba por el dolor y honestamente, nunca hubiese querido que dejase de hacerlo, a pesar del dolor que mi cuerpo sentía, el calor y el cariño de mi familia era lo que más precisaba en ese momento. Al escuchar a Vheilian, más miembros de la familia; hermanos, tías, abuela, fueron llegando para recibirme y preguntar cómo estaba... Durante la noche, había llegado un momento en el que necesitaba salir al exterior y recibir directamente sobre mi piel los rayos de la luna sobre mi piel, salí a la balconera, mi padre había dado ordén de que me dejasen tranquila y no me atosigaran a preguntas, por lo que me permitieron salir sóla, sin tampoco apartar las miradas. Allí estaba él, esperando encontrarme un momento a solas para dejarse ver, me tomó en sus brazos, su mano me levantó la barbilla para aproximar mis labios a los suyos y acabar fundiéndonos en un beso apasionado, sus brazos se aferrarón a mi cuerpo. Sus labios se alejó unos centímetros de los míos, lo justo para que sus ojos se encontrarán con los míos "Te amo, te amo, te amo.... eres una loca, te dije que no fueras.... pero aún así, graciassss" sonreí "es lo menos que podría hacer por mi prometido, ¿No?" ahora fue él quien sonrió y nuestros labios volvieron a fundirse en un juego de pasión. -FIN-
._.U por fin acabé..... espero haya sido de vuestro agrado ésta historia y que además os sirva para comprender un poquito más a la alocada de xRaynexBlood x'DDD Para todos vosotros familia, disfrútenlo y sino, borrénlo xDD mejor no, me mandaís una copia antes XDDD Eternas lunas y recordárlo, os amo a todooooooooooooooooos
miércoles, 26 de enero de 2011
CAPÍTULO SEIS
Adoraba su sonrisa cuando, en mis fiestas de cumpleaños lograba mi objetivo en su tarea de buscar mi regalo por medio de encriptados jeroglíficos enreversados que me guiaban por toda la casa y el jardín hasta el lugar donde lo habría de esconder. Se sentía tan orgulloso de mí y me amaba tanto como su hija propia. Mis recuerdos mortales siempre fueron fugazes pero se mantenían vivos gracias a mis padres adoptivos. Según la historia que me contarón mis padres en el orfanato donde me entregarón en adopción mis únicas presedencias era un talisman con una rosa como único emblema adornándo una esfera rúnica con un tallado en un extraño idioma y bañado en oro blanco salvo la rosa cuyo metal era tan extraño como las letras del grabado y de un color negro como la misma oscuridad, el director del centro siempre mantuvo que mi mirada era extraña, pero aseguraba que era una niña tierna y muy despierta. Según iba creciendo mi emblema era ser alguien altamente tímida, resguardada de entablar relación con el resto de chiquillos y siempre había seriedad en mi rostro, el único capaz de arrancárme una sonrisa era mi padre, tanto que muchos envidiaban tal capacidad en él. En 1994, en una noche de invierno, mi padre fue hallado brutalmente asesinado, su cuerpo fue duramente golpeado, desmembrado extremidades y arrancádo la mandíbula inferior y robado los ojos... eso, para una niña de 10 años fue algo más que un simple trauma, caí en una catatonía que para muchos llegaron a temer por mi vida. Mi madre afrontó la tragedia, buscó trabajo y me mantuvo aunque en ella nació un odio hacia mí, su depresión por perder al hombre que amaba de aquella manera le hacia refugiarse en que yo era la culpable y causante de aquella muerte. Yo por mi lado me refugié en mi misma, creándo una barrera mental inaccesible haciéndome vulnerable a las burlas de quienes me rodeaban, con ello también llegué a entrar en un estado algo bipolar pues creé una personalidad completamente adversa que me permitía controlar mis sentimientos e impulsos sociológicos. A pesar de aquello, mi vida siguió su curso y la falta de cariño y a mi personalidad bipolar, me permitierón mantener un semblante duro y frío, acabé el curso en el colegio privado para niñas y emprendí un duro trabajo en la facultad de lengua inglesa, historia y encriptología arqueológica. En aquel tiempo de facultad, conocí a un chico en la cafetería para la que le dedicaba algunas horas para pagarme la universidad y con él fue con quien conocí el amor y la locura de sentírme persona, lo era todo para mí y de hecho íbamos a casarnos una vez finalizáramos nuestras carreras. Tenía un bello sueño de montar una clínica veterinaría, siempre que le recuerdo una sonrísa aflora mi rostro, aunque trágicamente encontró con la fría mano de la muerte tras recibir tres disparos de escopeta en la frente... Fue duro soportar aquella nueva muerte en mi vida, con él habría logrado superar la muerte de mi padre y la barrera de mi mente había sido casi extinguido, pero nuevamente el destino quiso una vez más encerrárme en mi pequeña jaula de sombras y silencio.
Aquella noche, al escapar de casa dejándo los cuerpos mutilados y semi chamuscados de mi madre y de mi hermana trás haber llamado a la policía me sentí que las tragedias de todas éstas personas fueran mi causa, mi mera presencia atraía la muerte más atroz a aquellos seres que amaba, a mi madre sólo le tenía el respeto por haberme entregado un pedacito de vida aunque fuese lleno de odios, pero me dió un techo, comida en la mesa y recuerdos de mi padre. Aquella noche, mi estado quizás fuese el peor de todos, me consumí en mi estado bipolar que prácticamente en toda mi vida me había acompañado, la voz de aquel extraño ser me invadía como único acompañánte en aquellas frías calles de Málaga, me aferraba con fuerza a los ladrillos de los edificios para no acabar sucumbiéndo en la oscuridad de la noche y entonces, mis ojos se toparón con los ojos de aquel hombre que se cruzó ocasionadamente chocándose con mi hombro. Mi cuerpo cayó al suelo como una muñeca de trapo, ni siquiera hice el afán de incorporarme, el hombre hizo apocope de preocuparse, su cuerpo giró hacia mí y fue en ese preciso momento cuando mis ojos se fijó en los de él.... Algo me cautivaba en aquellos ojos cual carmesí, rojo intenso del mismo color que bañaba mis ropas y mi cuerpo, penetrántes como dagas clavándose en mis entrañas, calculadores y fríos como la misma muerte, pero no tube miedo de ellos, sino todo lo contrario sentí pasión por ellos. Tomé la mano que me tendió para incorporarme, "¿Ésta usted bien, mi lady?" aquella voz sonó más dentro de mi cabeza que por mis oídos, estaba ensimismada con sus ojos y asentí con el rostro serío y con las lágrimas aún derramándose por mis mejillas, "sea lo que le ocurra, mi lady, no debería endurecer su belleza" quedé en silencio, tan sólo las lágrimas surgían con más impetú que antes, "Mmh... sé que no quieres morír, sé que no lo deseas" silencio, "Yo puedo otorgarte placeres inigualables, fuerza y destreza inhumanas, poderes que sólo los Dioses son capaces de igualar... pero..." calló un momento para comprobar que había logrado llamar mi atención, mis lágrimas aún caían pero mis sollozos habían cesado... "No soy yo quien debe tomar la decisión, eso es sólo tuya si deseas formar parte de un mundo basado en oscuridad, noches eternas, la sangre tu único sustento, yo te otorgo y concedo el don, pero eres tú quien debes decidir si deseas convertírte en mi chiquilla" me dejó en silencio para que hablase, durante unos segundos, mi cerebro estaba intentándo desesperadamente tratándo de creer sus palabras, algo que agarrárme aunque sólo sea una idea fantasiosa como la vida eterna mismamente... mis labios se abrieron y una voz quebrada surtió desde mi interior "Señor, no sé quién o qué es usted, todo me parece sacado de una pelí de Stephen King en el que el "vampiro" trata de engatusar a la muchacha para al final matárla, todo es que sólo sea un loco al igual que acabaré siendo yo misma si no acabo con ésta tortura que guardo en mi interior..." le miré a los ojos una vez más y sentir esa extraña sensación "Sólo deseo que ésto acabe, no quiero más muertes... no a los que amo..." y como si algo en mí se aferrara a las palabras de aquel hombre, le supliqué en silencio que me llevase a donde fuera. Y en aquel momento como si de la nada surgiera una luz reveladora, un nombre llenó mi mente "Lord Vheilian", susurré aquel nombre en un susurro casi impercibible pero Lord Vheilian oyó como le nombré y sorprendido de que descubriese su nombre sonrió mostrándome aquellos dientes perfectos y blancos como la misma pureza y sus colmillos tan afilados y largos cual cuchillas depredadoras. Aquellos fuertes brazos de gran guerrero me alzarón llevándome consigo, haciendome sentir protegida, hundí mi rostro en el pecho de aquel hombre y la carencia de sus latidos me hizo sentir algo nostálgica pues intuía que en poco tiempo yo sería un ser como él, sacado de las tinieblas, sedienta de sangre humana, un ser desterrado de la naturaleza de Dios,castigado a deambular en las penumbras y escapándo de la luz solar... "Bien, mi pequeña... ¿qué naturaleza entierras en tu corazón?" aquella pregunta me extrañó pero luego oí otra palabra que no pude caracterizar y mi mente cayó en una bruma oscura y silenciosa....
Me quedé mirándo a aquel maldito ser que había matado a mi familia, había matado al primer chico por el cuál me enamoré aún cuando era mortal, había destrozado y aniquilado la raza de mi prometido, y casi asesinado a XXDIABOLOXXX sino fuera porque lo estaba usándo de conejillo de indias, sentí tanto odio que sin pensar ni escuchar las palabras que me decía me lanzé en un ataque directo jugándo con mi cuerpo en movimientos rápidos y ágiles saltándo y alzándo mis piernas para propinárle una patada en su rostro, pero todo golpe que acertaba era como si golpease el mismo aire, no le afectaba en lo más mínimo y con ello provocaba que riera a mi costa. Me detuve en mi ataque, retrocedí unos pasos en postura de defensa con mis cuchillas apuntándo a su dirección mientras él prosiguió hablando... "¿No lo entiendes, o es que simplemente no quieres escuchar lo que se te dice? ¡Necía!" levantó una mano, sólo una mano y una onda surgió de sus palmas como un huracán empujándo y levantándo mi cuerpo al aire... noté un dolor intenso en mi espalda cuando una pared detuvo mi cuerpo lanzado por aquella fuerza invisible, mi cuerpo se desplomó en el piso cual largo era con todo el peso que llevaba, sentí como todo mi ser se desplomaba junto a mi cuerpo, me sentí dolorida y aquel nefasto ser seguía hablándome, "¡RAYNE! ¿Acaso no sabes quien eres? pues YO te lo diré, ¡ERES MI HIJA!" levanté mi rostro enfurecido ¿cómo que era su hija? ¿de qué diablos me estaba hablando? y en ese momento una imágen de ese mismo ser violándo un ángel se consolidó como si estuviese visualizándo una película, aquella maldita criatura tenía al ángel atado como lo estaba ahora mi amado, la tenía con sus ropas celestiales destrozada, su cuerpo hermoso y traslúcido mostraba duros golpes, le habían desmembrado un brazo, le había mordido por los muslos, cuello y labios, los ojos estaban hinchados por el sollozo y por golpes, sangraban a borbotones pues pareciera que le hubiesen atravesado los ojos con algo punzante. Veía como Nefistófeles la poseía con fuerza agarrándola por las piernas mientras ella no paraba de gritar y aclamar piedad. Una de las alas, la única que conservaría trás perder la otra trataba de deshacerse del cuerpo que la estaba forzejeándo pero inutilmente, él la tenía apresada y su risa se podía oír hasta los confínes del mundo terrenal. Cuando acabara de satisfacer sus necesidades sexuales, Nefistófeles la tomó del cuello la liberó y le susurró "Sé prudente dulce ángel y concédeme un hijo varón" trás sus palabras le escupió en el rostro, las cadenas que se incrustaba en sus muñecas desaparecierón dejándo su cuerpo caer con todo su peso y Nefistófeles desapareció así sin más como un halo fantasmal.... Una sóla lágrima negra surgió de mi ojo derecho.... no podía averiguar el nombre de mi madre, pero ese cariño y ternura, ese amor maternal nació en mí en cuanto ví aquel ángel siendo violada confirmándome que aquello que acababa de ver era real, que aquel maldito me concebió por la fuerza, que mi naturaleza era una mezcla entre el bien y el mal y odié más aún a aquel ser...-CONTINUARÁ-
Por fin está el capítulo 6, espero os guste aunque sea un poco enreversado, pero como dijera en el 5º capítulo, éste iba a tratar un poco más del pasado mortal de mi personaje, espero sea comprensible y os guste, un cordial saludo Atte. xRaynexBlood
Adoraba su sonrisa cuando, en mis fiestas de cumpleaños lograba mi objetivo en su tarea de buscar mi regalo por medio de encriptados jeroglíficos enreversados que me guiaban por toda la casa y el jardín hasta el lugar donde lo habría de esconder. Se sentía tan orgulloso de mí y me amaba tanto como su hija propia. Mis recuerdos mortales siempre fueron fugazes pero se mantenían vivos gracias a mis padres adoptivos. Según la historia que me contarón mis padres en el orfanato donde me entregarón en adopción mis únicas presedencias era un talisman con una rosa como único emblema adornándo una esfera rúnica con un tallado en un extraño idioma y bañado en oro blanco salvo la rosa cuyo metal era tan extraño como las letras del grabado y de un color negro como la misma oscuridad, el director del centro siempre mantuvo que mi mirada era extraña, pero aseguraba que era una niña tierna y muy despierta. Según iba creciendo mi emblema era ser alguien altamente tímida, resguardada de entablar relación con el resto de chiquillos y siempre había seriedad en mi rostro, el único capaz de arrancárme una sonrisa era mi padre, tanto que muchos envidiaban tal capacidad en él. En 1994, en una noche de invierno, mi padre fue hallado brutalmente asesinado, su cuerpo fue duramente golpeado, desmembrado extremidades y arrancádo la mandíbula inferior y robado los ojos... eso, para una niña de 10 años fue algo más que un simple trauma, caí en una catatonía que para muchos llegaron a temer por mi vida. Mi madre afrontó la tragedia, buscó trabajo y me mantuvo aunque en ella nació un odio hacia mí, su depresión por perder al hombre que amaba de aquella manera le hacia refugiarse en que yo era la culpable y causante de aquella muerte. Yo por mi lado me refugié en mi misma, creándo una barrera mental inaccesible haciéndome vulnerable a las burlas de quienes me rodeaban, con ello también llegué a entrar en un estado algo bipolar pues creé una personalidad completamente adversa que me permitía controlar mis sentimientos e impulsos sociológicos. A pesar de aquello, mi vida siguió su curso y la falta de cariño y a mi personalidad bipolar, me permitierón mantener un semblante duro y frío, acabé el curso en el colegio privado para niñas y emprendí un duro trabajo en la facultad de lengua inglesa, historia y encriptología arqueológica. En aquel tiempo de facultad, conocí a un chico en la cafetería para la que le dedicaba algunas horas para pagarme la universidad y con él fue con quien conocí el amor y la locura de sentírme persona, lo era todo para mí y de hecho íbamos a casarnos una vez finalizáramos nuestras carreras. Tenía un bello sueño de montar una clínica veterinaría, siempre que le recuerdo una sonrísa aflora mi rostro, aunque trágicamente encontró con la fría mano de la muerte tras recibir tres disparos de escopeta en la frente... Fue duro soportar aquella nueva muerte en mi vida, con él habría logrado superar la muerte de mi padre y la barrera de mi mente había sido casi extinguido, pero nuevamente el destino quiso una vez más encerrárme en mi pequeña jaula de sombras y silencio.
Aquella noche, al escapar de casa dejándo los cuerpos mutilados y semi chamuscados de mi madre y de mi hermana trás haber llamado a la policía me sentí que las tragedias de todas éstas personas fueran mi causa, mi mera presencia atraía la muerte más atroz a aquellos seres que amaba, a mi madre sólo le tenía el respeto por haberme entregado un pedacito de vida aunque fuese lleno de odios, pero me dió un techo, comida en la mesa y recuerdos de mi padre. Aquella noche, mi estado quizás fuese el peor de todos, me consumí en mi estado bipolar que prácticamente en toda mi vida me había acompañado, la voz de aquel extraño ser me invadía como único acompañánte en aquellas frías calles de Málaga, me aferraba con fuerza a los ladrillos de los edificios para no acabar sucumbiéndo en la oscuridad de la noche y entonces, mis ojos se toparón con los ojos de aquel hombre que se cruzó ocasionadamente chocándose con mi hombro. Mi cuerpo cayó al suelo como una muñeca de trapo, ni siquiera hice el afán de incorporarme, el hombre hizo apocope de preocuparse, su cuerpo giró hacia mí y fue en ese preciso momento cuando mis ojos se fijó en los de él.... Algo me cautivaba en aquellos ojos cual carmesí, rojo intenso del mismo color que bañaba mis ropas y mi cuerpo, penetrántes como dagas clavándose en mis entrañas, calculadores y fríos como la misma muerte, pero no tube miedo de ellos, sino todo lo contrario sentí pasión por ellos. Tomé la mano que me tendió para incorporarme, "¿Ésta usted bien, mi lady?" aquella voz sonó más dentro de mi cabeza que por mis oídos, estaba ensimismada con sus ojos y asentí con el rostro serío y con las lágrimas aún derramándose por mis mejillas, "sea lo que le ocurra, mi lady, no debería endurecer su belleza" quedé en silencio, tan sólo las lágrimas surgían con más impetú que antes, "Mmh... sé que no quieres morír, sé que no lo deseas" silencio, "Yo puedo otorgarte placeres inigualables, fuerza y destreza inhumanas, poderes que sólo los Dioses son capaces de igualar... pero..." calló un momento para comprobar que había logrado llamar mi atención, mis lágrimas aún caían pero mis sollozos habían cesado... "No soy yo quien debe tomar la decisión, eso es sólo tuya si deseas formar parte de un mundo basado en oscuridad, noches eternas, la sangre tu único sustento, yo te otorgo y concedo el don, pero eres tú quien debes decidir si deseas convertírte en mi chiquilla" me dejó en silencio para que hablase, durante unos segundos, mi cerebro estaba intentándo desesperadamente tratándo de creer sus palabras, algo que agarrárme aunque sólo sea una idea fantasiosa como la vida eterna mismamente... mis labios se abrieron y una voz quebrada surtió desde mi interior "Señor, no sé quién o qué es usted, todo me parece sacado de una pelí de Stephen King en el que el "vampiro" trata de engatusar a la muchacha para al final matárla, todo es que sólo sea un loco al igual que acabaré siendo yo misma si no acabo con ésta tortura que guardo en mi interior..." le miré a los ojos una vez más y sentir esa extraña sensación "Sólo deseo que ésto acabe, no quiero más muertes... no a los que amo..." y como si algo en mí se aferrara a las palabras de aquel hombre, le supliqué en silencio que me llevase a donde fuera. Y en aquel momento como si de la nada surgiera una luz reveladora, un nombre llenó mi mente "Lord Vheilian", susurré aquel nombre en un susurro casi impercibible pero Lord Vheilian oyó como le nombré y sorprendido de que descubriese su nombre sonrió mostrándome aquellos dientes perfectos y blancos como la misma pureza y sus colmillos tan afilados y largos cual cuchillas depredadoras. Aquellos fuertes brazos de gran guerrero me alzarón llevándome consigo, haciendome sentir protegida, hundí mi rostro en el pecho de aquel hombre y la carencia de sus latidos me hizo sentir algo nostálgica pues intuía que en poco tiempo yo sería un ser como él, sacado de las tinieblas, sedienta de sangre humana, un ser desterrado de la naturaleza de Dios,castigado a deambular en las penumbras y escapándo de la luz solar... "Bien, mi pequeña... ¿qué naturaleza entierras en tu corazón?" aquella pregunta me extrañó pero luego oí otra palabra que no pude caracterizar y mi mente cayó en una bruma oscura y silenciosa....
Me quedé mirándo a aquel maldito ser que había matado a mi familia, había matado al primer chico por el cuál me enamoré aún cuando era mortal, había destrozado y aniquilado la raza de mi prometido, y casi asesinado a XXDIABOLOXXX sino fuera porque lo estaba usándo de conejillo de indias, sentí tanto odio que sin pensar ni escuchar las palabras que me decía me lanzé en un ataque directo jugándo con mi cuerpo en movimientos rápidos y ágiles saltándo y alzándo mis piernas para propinárle una patada en su rostro, pero todo golpe que acertaba era como si golpease el mismo aire, no le afectaba en lo más mínimo y con ello provocaba que riera a mi costa. Me detuve en mi ataque, retrocedí unos pasos en postura de defensa con mis cuchillas apuntándo a su dirección mientras él prosiguió hablando... "¿No lo entiendes, o es que simplemente no quieres escuchar lo que se te dice? ¡Necía!" levantó una mano, sólo una mano y una onda surgió de sus palmas como un huracán empujándo y levantándo mi cuerpo al aire... noté un dolor intenso en mi espalda cuando una pared detuvo mi cuerpo lanzado por aquella fuerza invisible, mi cuerpo se desplomó en el piso cual largo era con todo el peso que llevaba, sentí como todo mi ser se desplomaba junto a mi cuerpo, me sentí dolorida y aquel nefasto ser seguía hablándome, "¡RAYNE! ¿Acaso no sabes quien eres? pues YO te lo diré, ¡ERES MI HIJA!" levanté mi rostro enfurecido ¿cómo que era su hija? ¿de qué diablos me estaba hablando? y en ese momento una imágen de ese mismo ser violándo un ángel se consolidó como si estuviese visualizándo una película, aquella maldita criatura tenía al ángel atado como lo estaba ahora mi amado, la tenía con sus ropas celestiales destrozada, su cuerpo hermoso y traslúcido mostraba duros golpes, le habían desmembrado un brazo, le había mordido por los muslos, cuello y labios, los ojos estaban hinchados por el sollozo y por golpes, sangraban a borbotones pues pareciera que le hubiesen atravesado los ojos con algo punzante. Veía como Nefistófeles la poseía con fuerza agarrándola por las piernas mientras ella no paraba de gritar y aclamar piedad. Una de las alas, la única que conservaría trás perder la otra trataba de deshacerse del cuerpo que la estaba forzejeándo pero inutilmente, él la tenía apresada y su risa se podía oír hasta los confínes del mundo terrenal. Cuando acabara de satisfacer sus necesidades sexuales, Nefistófeles la tomó del cuello la liberó y le susurró "Sé prudente dulce ángel y concédeme un hijo varón" trás sus palabras le escupió en el rostro, las cadenas que se incrustaba en sus muñecas desaparecierón dejándo su cuerpo caer con todo su peso y Nefistófeles desapareció así sin más como un halo fantasmal.... Una sóla lágrima negra surgió de mi ojo derecho.... no podía averiguar el nombre de mi madre, pero ese cariño y ternura, ese amor maternal nació en mí en cuanto ví aquel ángel siendo violada confirmándome que aquello que acababa de ver era real, que aquel maldito me concebió por la fuerza, que mi naturaleza era una mezcla entre el bien y el mal y odié más aún a aquel ser...-CONTINUARÁ-
Por fin está el capítulo 6, espero os guste aunque sea un poco enreversado, pero como dijera en el 5º capítulo, éste iba a tratar un poco más del pasado mortal de mi personaje, espero sea comprensible y os guste, un cordial saludo Atte. xRaynexBlood
lunes, 24 de enero de 2011
Giros del Destino
Capitulo 3 / 2 Parte
Una ira irrefrenable
El cuerpo sin vida de uno de los guardianes de la fortaleza de Lord Raul cayo al suelo mientras avanzando hacia la entrada se encontraba Lord Vheilian, empuñando el filo, ensangrentado de su espalda rozaba el camino de adoquines grises, atras de él, todo un camino con cuerpos en el suelo, mientras la sangre manchaba su armadura, pero no era su sangre, era la sangre de sus enemigos, de los que no abrian su bocota, y los que creían poder mas que él, las nubes cubrian cuartos de la luna que se alzaba en lo alto naranjada, casi rojiza, una hermosa melodía sangrienta, para tomar venganza por atreverse a tomar algo suyo, por sus hijas, por su hija, por su honor, y por su nieta, aquella pequeña que ahora estaba dentro de esas paredes, el filoso metal manchado con sangre rozaba un poco los mosaicos grises de piedra, mientras las botas de su armadura anunciaban con un lúgubre eco su llegada, mas guardianes llegaron a su encuentro mientras lanzaban ataques agiles, pero nada pensados, el con una agilidad sublime, esquivó, y casi sin esforzarse, blandiendo su espada, derribaba los ahora cadaveres degollados de los que se le interponian, un ultimo cayó al suelo, en total panico viendo como otro de sus compañeros caia muerto al suelo, retemblando, dejó caer su casco mientras se arrastraba de espaldas al suelo, mirando a el visitante que ahora agachandose, lo tomó por la tela de el cuello de lo que fuese su ropa, alzandolo del suelo, separandolo del mismo un buen par de centimetros, la voz seria, atronadora y casi de pesadilla de Lord Vheilian, se escucho - La niña, ¿donde esta? - el vampiro, asustado delante de el retemblaba mientras trataba de hablar, sus tartamudeos eran continuos, mientras el pobre trataba de formular - L...le diré...donde...donde esta....so...solo no me ma..mate - decia suavemente, Lord Vheilian serio, y frio, haciendo a ese vampiro temblar de terror, luchando por volver a contestar formuló - En...en el pal...palacio....en...u....una habita...habitacion conti...contigua a....la oficina de....L...Lord Raul - Vheilian, cargandose al pobre, se lo llevó a arrastras hasta la entrada donde luego de derribar a los dos celadores de la puerta entró al enorme palacio, sus pasos retumbaron en el suelo de marmol negro, aun jalando al sujeto- Guiame...- ordenó Vheilian al sujeto que ahora tropezando comenzó a avanzar delante de el, era quizá demasiado increible que aquel vampiro solo hubiese podido cargarse a toda la guardia, pero lo hizo y los vió caer delante sus ojos, ese vampiro iba muy enserio, subieron unas grandes escaleras mientras, lo guiaban cuando llegaron, Vheilian miró al vampiro y dijo- Por tu propio bien....si no quieres morir, mas vale que te vallas de aqui...- susurró antes de patear la puerta, descubriendo el interior de la oficina donde estaba Raul, Vheilian alzó la espada apuntando hacia Raul - Que Cain te libre de haber lastimado a mi niña... - dijo el avanzando paso tras paso, acercandose a Lord Raul que ahora tomó una de las espadas que estaban colgadas cerca de su escritorio, y justo cuando se gira, logra chocar su espada contra la de Lord Vheilian que ahora estaba frente a frente con el, pudo ver que Raul estaba pensando en largarse del pais, con su pequeña, y en un arranque de ira comenzó el combate, entre ambos vampiros, derribando y cortando cosas, Vheilian por supuesto tenia mas agilidad, no tardo moviendose muy rapido en tumbarlo al suelo, mientras Raul alzaba la vista.
-Ella....E-Ella...es MI hija....no...no tienes derecho - dijo mientras aturdido se levantaba, lanzando un ataque directo a su estomago, pero fue detenido por Vheilian que le torcio la mano, ambos agitados - NO....ella...es MI nieta...punto...- con un agilidad increible lo lanzó de cabeza al suelo y desenfundando su segunda espada, hizo un corte en su costado, y el segundo a nivel de su cuello, fallando intencionalmente, con movimientos de esgrima, mezclado con algo de artes marciales.
- Si me asesinas, tu y tu maldito clan se iran al infierno - amenazó -...una vez mi padre se entere que......has levantado tu espada contra mi...- volvio a lanzar un nuevo ataque, pero Lord Vheilian ya no iba para juegos, avanzando un par de pasos, con una zancadilla lo tumbó al suelo y levantandose, pisó uno de sus costados escuchando un crujido, fuerte, con una de sus espadas la colocó en su cuello, casi clando la punta y provocando que sangre brotara - Creeme que no abrá quien te libre de est.....-
- Awelito? -
Lord Vheilian se detuvo en seco, y se giró, mal movimiento pero presiono mas su espada para hacerle saber a su enemigo que lo tenia vigilado - Nieta de mi corazon...- el pie que pisaba su costado piso mas, escuchando mas crujidos, ahogados por la voz de Vheilian - Ahhh!! vine para llevarte a casa preciosa...- Raul escupio sangre tosiendo mientras Vheilian con su cuerpo tapaba el cuerpo de Raul sufriendo espasmos atorandose con su propia sangre, sonrió a la pequeña -...por que no vas por tu abrigo preciosa?...hoy te contare la historia de como tu abuelo, vencio a un vampiro malo que queria lastimar a una princesa...- pisó su garganta asfixiandolo, la pequeña sonrió ampliamente - Si awelito!...- sonrió mas y se giró entrando a la habitacion, la sonrisa dulce de Vheilian desaparecio tornandose sombrio -...largate de aqui...te destierro de este territorio por siempre.....donde vuelva a ver tu cara por aqui......me asegurare de acabarte...completamente....entendiste? - Raul no supo que decir, escupio sangre mientras se trataba de separar -...tu...ma-mal-d...maldito...- susurró entrecortadamente , Lord Vheilian apretó mas su garganta contra el suelo -...Respuesta Equivocada....¿Entendiste?...- Lord Raul tosio y entre ahogos pudo formular - S-Si L...Lord V...Vheilian...- El lo liberó - ahora LARGO....- mientras lo veia toser, y salir por la puerta, para cuando la pequeña salió, con su abriguito, su abuelito enfundaba su espada y casi como si un sol lo iluminara, sonrió a la pequeña luego de limpiar su armadura por encima y la sangre, le extendio los brazos como si nada - Vamos pequeña, vamos a casa...- dijo su abuelo con una enorme sonrisa, nop, su niña no conoceria ese lado terrible de él aun, abriendo las grandes ventanas, salió a la noche con su hermosa niña a los brazos, para devolverla a donde pertenecia.
Su Familia...
Su Corazon....
---------------------------------------------
Ta daaaaaaaaaaaaaaaaaah xD tanto lio con este final pfft ._.
xDD pero lo amé <3 !!! y espero que les haya gustado ^^
Una ira irrefrenable
El cuerpo sin vida de uno de los guardianes de la fortaleza de Lord Raul cayo al suelo mientras avanzando hacia la entrada se encontraba Lord Vheilian, empuñando el filo, ensangrentado de su espalda rozaba el camino de adoquines grises, atras de él, todo un camino con cuerpos en el suelo, mientras la sangre manchaba su armadura, pero no era su sangre, era la sangre de sus enemigos, de los que no abrian su bocota, y los que creían poder mas que él, las nubes cubrian cuartos de la luna que se alzaba en lo alto naranjada, casi rojiza, una hermosa melodía sangrienta, para tomar venganza por atreverse a tomar algo suyo, por sus hijas, por su hija, por su honor, y por su nieta, aquella pequeña que ahora estaba dentro de esas paredes, el filoso metal manchado con sangre rozaba un poco los mosaicos grises de piedra, mientras las botas de su armadura anunciaban con un lúgubre eco su llegada, mas guardianes llegaron a su encuentro mientras lanzaban ataques agiles, pero nada pensados, el con una agilidad sublime, esquivó, y casi sin esforzarse, blandiendo su espada, derribaba los ahora cadaveres degollados de los que se le interponian, un ultimo cayó al suelo, en total panico viendo como otro de sus compañeros caia muerto al suelo, retemblando, dejó caer su casco mientras se arrastraba de espaldas al suelo, mirando a el visitante que ahora agachandose, lo tomó por la tela de el cuello de lo que fuese su ropa, alzandolo del suelo, separandolo del mismo un buen par de centimetros, la voz seria, atronadora y casi de pesadilla de Lord Vheilian, se escucho - La niña, ¿donde esta? - el vampiro, asustado delante de el retemblaba mientras trataba de hablar, sus tartamudeos eran continuos, mientras el pobre trataba de formular - L...le diré...donde...donde esta....so...solo no me ma..mate - decia suavemente, Lord Vheilian serio, y frio, haciendo a ese vampiro temblar de terror, luchando por volver a contestar formuló - En...en el pal...palacio....en...u....una habita...habitacion conti...contigua a....la oficina de....L...Lord Raul - Vheilian, cargandose al pobre, se lo llevó a arrastras hasta la entrada donde luego de derribar a los dos celadores de la puerta entró al enorme palacio, sus pasos retumbaron en el suelo de marmol negro, aun jalando al sujeto- Guiame...- ordenó Vheilian al sujeto que ahora tropezando comenzó a avanzar delante de el, era quizá demasiado increible que aquel vampiro solo hubiese podido cargarse a toda la guardia, pero lo hizo y los vió caer delante sus ojos, ese vampiro iba muy enserio, subieron unas grandes escaleras mientras, lo guiaban cuando llegaron, Vheilian miró al vampiro y dijo- Por tu propio bien....si no quieres morir, mas vale que te vallas de aqui...- susurró antes de patear la puerta, descubriendo el interior de la oficina donde estaba Raul, Vheilian alzó la espada apuntando hacia Raul - Que Cain te libre de haber lastimado a mi niña... - dijo el avanzando paso tras paso, acercandose a Lord Raul que ahora tomó una de las espadas que estaban colgadas cerca de su escritorio, y justo cuando se gira, logra chocar su espada contra la de Lord Vheilian que ahora estaba frente a frente con el, pudo ver que Raul estaba pensando en largarse del pais, con su pequeña, y en un arranque de ira comenzó el combate, entre ambos vampiros, derribando y cortando cosas, Vheilian por supuesto tenia mas agilidad, no tardo moviendose muy rapido en tumbarlo al suelo, mientras Raul alzaba la vista.
-Ella....E-Ella...es MI hija....no...no tienes derecho - dijo mientras aturdido se levantaba, lanzando un ataque directo a su estomago, pero fue detenido por Vheilian que le torcio la mano, ambos agitados - NO....ella...es MI nieta...punto...- con un agilidad increible lo lanzó de cabeza al suelo y desenfundando su segunda espada, hizo un corte en su costado, y el segundo a nivel de su cuello, fallando intencionalmente, con movimientos de esgrima, mezclado con algo de artes marciales.
- Si me asesinas, tu y tu maldito clan se iran al infierno - amenazó -...una vez mi padre se entere que......has levantado tu espada contra mi...- volvio a lanzar un nuevo ataque, pero Lord Vheilian ya no iba para juegos, avanzando un par de pasos, con una zancadilla lo tumbó al suelo y levantandose, pisó uno de sus costados escuchando un crujido, fuerte, con una de sus espadas la colocó en su cuello, casi clando la punta y provocando que sangre brotara - Creeme que no abrá quien te libre de est.....-
- Awelito? -
Lord Vheilian se detuvo en seco, y se giró, mal movimiento pero presiono mas su espada para hacerle saber a su enemigo que lo tenia vigilado - Nieta de mi corazon...- el pie que pisaba su costado piso mas, escuchando mas crujidos, ahogados por la voz de Vheilian - Ahhh!! vine para llevarte a casa preciosa...- Raul escupio sangre tosiendo mientras Vheilian con su cuerpo tapaba el cuerpo de Raul sufriendo espasmos atorandose con su propia sangre, sonrió a la pequeña -...por que no vas por tu abrigo preciosa?...hoy te contare la historia de como tu abuelo, vencio a un vampiro malo que queria lastimar a una princesa...- pisó su garganta asfixiandolo, la pequeña sonrió ampliamente - Si awelito!...- sonrió mas y se giró entrando a la habitacion, la sonrisa dulce de Vheilian desaparecio tornandose sombrio -...largate de aqui...te destierro de este territorio por siempre.....donde vuelva a ver tu cara por aqui......me asegurare de acabarte...completamente....entendiste? - Raul no supo que decir, escupio sangre mientras se trataba de separar -...tu...ma-mal-d...maldito...- susurró entrecortadamente , Lord Vheilian apretó mas su garganta contra el suelo -...Respuesta Equivocada....¿Entendiste?...- Lord Raul tosio y entre ahogos pudo formular - S-Si L...Lord V...Vheilian...- El lo liberó - ahora LARGO....- mientras lo veia toser, y salir por la puerta, para cuando la pequeña salió, con su abriguito, su abuelito enfundaba su espada y casi como si un sol lo iluminara, sonrió a la pequeña luego de limpiar su armadura por encima y la sangre, le extendio los brazos como si nada - Vamos pequeña, vamos a casa...- dijo su abuelo con una enorme sonrisa, nop, su niña no conoceria ese lado terrible de él aun, abriendo las grandes ventanas, salió a la noche con su hermosa niña a los brazos, para devolverla a donde pertenecia.
Su Familia...
Su Corazon....
---------------------------------------------
Ta daaaaaaaaaaaaaaaaaah xD tanto lio con este final pfft ._.
xDD pero lo amé <3 !!! y espero que les haya gustado ^^
Giros del Destino
Capitulo 3
Una ira irrefrenable
Lord Vheilian jugaba con su nieta a las escondidas en los jardines del clan, ahora contaba hasta el 10, mientras que la niña que habia empezado a despertar emocionalmente y a familiarizarse con su nueva familia, se escondía mientras reia por lo bajo.
- 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10!!!! alli voy nieta hermosa! - dijo él sonriente, mientras se descubria los ojos y miraba alrededor, buscando a la pequeña, no podian creerlo, era facil preguntarse hace cuanto no habian visto a Lord Vheilian tan juguetón y pasar mas rato jugando con una niña que metido atendiendo asuntos del clan, desde que habia llegado la pequeña, los pasillos del clan se habian llenado de risas, y la voz encantadora de la curiosa Kirika que ahora, comenzaba a mostrar razgos de su personalidad, aflorando poco a poco, y su presencia se estaba reflejando en el humor de todos.
- Ayer tu padre me preguntó, si no seria lindo tener un bebé - dijo Lady Mairel, viendo la graciosa escena de su marido, buscando a la niña que se escondia proxima a el, en unos arbustos.
Esbozó una sutil sonrisa - Bueno, a mi me dieron ganas de tener un bebe - Dijo Carmilla quien ahora bebía un Bloody Mary, Rayne soltó una carcajada y dijo - ¿En esta temporada mami? - Mairel miró a su hija por un instante, y agregó con suavidad, volviendo a mirar a su esposo, que acababa de encontrar a la pequeña - tienes razón, en este momento de inestabilidad, lo que menos necesita el clan, son mujeres embarazadas - Sara que habia mantenido silencio, embelezada viendo lo hermosa que era su hija, seria capaz de matar por ella, amaba todo de ella, todo, incluyendo su incapacidad de llevar un vestido por mas de 20 minutos, y su aficion a tocar, agarrar, manipular, y encontar las armas del clan, todo apuntaba a que seria tal como su nombre lo decía, una guerrera del ocaso, sin embargo no podia mantenerla encerrada en el castillo del clan, Rigoberto habia sujerido ir a llevarla de paseo, pero ella no estaba convencida, aun asi, su hermano se la habia pasado todo el dia fregando sobre el dichoso paseo, asi que a fin de cuentas irian.
- Ya nos vamos hermanita - dijo Rigoberto, mientras se preparaba, acababa de llegar de hacer unos recados que su padre le habia encomendado, el muy despistado Rigo, se habia demorado ocho siglos, Sara sonrió algo no convencida agregando - esta bien hermano....- miró a su padre que ya se aproximaba con su pequeña nieta en sus brazos que se abrazaba fuertemente a el - ¿Ya se van? - preguntó Vheilian, mientras dejaba a la niña en el suelo, hizo pucheros, le dolia tener que dejarla ir, pero la verdad era que podria pasarse jugando con la pequeña sin cansarse - Sip ya nos vamos Pa´ , no te preocupes nos irá bien...- terminó Rigo mientras sonreia mas ampliamente, miró a su hermana Sara que ahora agachada acomodaba su abriguito con cuidado -...ya mi niña mosha vamos - sonrió con dulzura mientras la tomaba de la mano, avanzando, la pequeña se giró para ver a su abuelito y con una voz dulce y tierna sacudio su mano libre en el aire - Te amo awelito!!! - sonriendo, Vheilian, sonrió ante aquella despedida, despidiendose con la mano, su esposa Mairel, sonrió y abrazando a su esposo dijo - ya ya, vendran mas tarde y podran seguir jugando - él depositó un beso en los labios de su hermosa esposa, mujer de su corazon, uno de sus tantos tesoros, y mirandola con adoración la cargó en brazos, Rayne y Carmilla, se miraron riendo mucho, cuando su padre agregó - Mis amadas hijas....- una sonrisa picara se dibujo en sus labios -...Paf!!!...- exclamó divertido, y extendiendo sus alas, se llevó a su mujer, con ambicion, y una noche planeada meticulosamente para cero interrupciones -
----------------------------------------oOo----------------------------------------------------
Lord Raul estaba fastidiado, su esposa Lara se la habia pasado llorando toda la maldita tarde sin tregua, desde que se habian ido de su hogar, el sabia que ella habia abandonado a su hija, una hija humana, suspiró mientras pensaba, silencioso, su niña, podria ser humana, quizá no era vampiro, pero si podia servirle de garantía para la herencia de su padre, sin embargo no sabia como resultaria todo el asunto, ya que se habia enterado que la pequeña, estaba en manos de el clan Imperio Inmortal, miró el anillo carmín en su dedo anular, y suspiró, la hija de su sangre no habia resultado ser como ellos deseaban, pero aun asi les era util, tenia que recuperarla.
Habia escuchado hablar para entonces de un festival que se llevaria a cabo esa noche en el pueblo, no podian faltar los niños, y si Lord Vheilian habia sido tan sobreprotector como para reclamarla, como lo hizo, seguramente era lo suficientemente paternal para llevarla de paseo, o mandar a alguien con ella, asi que esbozando una sonrisa, miró el reloj, pensativo - Vladimir - dijo suavemente, el sirviente diestro en su trabajo, se apresuró a entrar a la habitacion - Prepara mi carruaje, esta noche...tenemos una mision...- el sirviente hizo una reverencia - Si mi señor - Lord Raul tomó su chaqueta y avanzó tomando su bastón de cedro, con el rubí en la empuñadura, saliendo con paso firme de la enorme habitacion victoriana.
------------------------------------oOo------------------------------------------
El festival era muy colorido, iban a haber atracciones de todo tipo, el circo tambien estaba alli, Rigo cargaba en sus hombros a la hermosa pequeña que miraba con fasinacion todo, las luces, las lamparas, todo llamaba su atencion, su madre ahora miraba de lado a lado, tensa, buscando peligro alguno que pudiese asechar, el clan estaba en un tiempo duro, en el que tenian que estar alertas, miró hacia su pequeña que parecia disfrutar de todo, la musica retumbaba en sus oidos, haciendola sonreir mas, ya habian estado caminando por un buen rato y Rigo parecia comenzar a distraerse con la nuevas cosas que habia, queria hechar un ojo, mientras tanto, Sara miró la hora, y agregó con suavidad- voy por algo para Kiri, hermano, debe tener hambre ya - Rigoberto sonrió mas y asintió - Anda hermana, yo la cuido - Sara lanzó una ultima mirada a su pequeña hija, y se retiró en busca de algo delicioso, para ella.
- A ver pequeña, veamos esta tienda, seguro encuentro algo genial para mi, y para ti - dijo al fin cediendo ante la tentacion de ver lo que habia de nuevo, sus ojos se enfocaron en unas nuevas camisas, sin embargo se dió cuenta que no podia hacer mucho con la pequeña en los hombros, asi que la bajó por un rato y sonriendo dijo - Quedate aqui de pie...si?, deja a tu tio Rigo ver algunas cosas - la niña se llevó un dedo a los labios y se quedó quieta, mientras miraba a todas las personas alrededor, fijando sus hermosos ojos avellana en todo, cuando los paso por la puerta, logró ver a alguien, una figura encapuchada, con una mascara de oro, que le habia hecho una seña de silencio, la pequeña y la persona, se miraron atentamente, este le hizo una seña para que se acercara, y eso hizo la niña mientras se aproximaba lentamente, miró una vez mas a su tio Rigo, que estaba entretenido viendo algunas cosas, cuando volvio sus ojos al frente, la figura estaba justo alli, delante, y tomandola en brazos, la cargó sacandola del local con rapidez...Lady Sara llegaba y pudo ver como una figura oscura se llevaba a la niña y lo que llevaba en las manos se le cayó gritando - KIRIKA!!!!!!!!!!!!!!.....- Rigoberto casi se cae del susto, miró alrededor, sip, estaba fregado, total y completamente fregado, se habia distraido y se habian llevado a su sobrina, y su madre habia empezado a correr en una persecucion completamente salvaje, corrió tras ella, mientras comenzaba a sentir que deberian llamar a su padre, alguien estaria enojado, muy enojado, Lady Sara se detuvo en seco, las figuras del festival, todas las mismas, trató de guiarse por el aroma de su pequeña pero habia demasiados, todo era caos, la gente no la dejó moverse rapido, con una ira irrefrenable, corrió hacia un callejón y sacando sus alas, que al salir rasgaron la tela de su ropa, y sobrevoló todo, pero ya era tarde, se la habian llevado, a lo lejos divisó el carruaje, y pudo detectar en el a su niña, su niña estaba alli, no tenia sus armas, pero era suya...su nena, cuando iba a contra atacar, Rigoberto la llamó gritandole:
-Sara!!....baja de una vez, estas desarmada, no podemos hacer nada, llamemos a papá, el sabra que hacer - Sara miró el carruaje, luego a su hermano, ir desarmada, aunque tuviera sus poderes, igual era riesgozo, maldijo por lo bajo y bajó cayendo al suelo de pie, enojada se alejó de su hermano, pero el tenia razón, su corazon comenzó a latir veloz, asustada, preocupada.
Quien haya osado raptar a su niña, iba a morir, de la forma mas terrible existente.
Lord Raul, no era ningún idiota, y sabia que habia provocado la ira de Lady SaraEvy, lo cual era sinonimo de muerte, habia secuestrado a su hija, de las manos de su nueva familia, y el rostro de Lord Vheilian seria lo ultimo que veria antes de dejar el mundo de los no-vivos - Cain...me libre - dijo suavemente viendo a la criatura dormida cubierta por la sabana, en el carruaje camino a su castillo, suspiró mirando las luces de la ciudad alejandose, luego a la pequeña, tenia tantas ganas de incarle el diente, pero era su hija, y el jamás habia tenido amor paternal, para el, ella era una niña humana, sabria bien, retiró la vista de la criatura mientras trataba de relajarse, pese a saber que si n actuaba rapidamente, se veria en un aprieto del cual solo saldria en ataud.
-------------------------------------oOo-------------------------------------------------
- QUE QUE??!!!!!! - gritó Lord Vheilian levantandose de golpe, Rigoberto algo palido no podia creer que su padre estuviese al borde de brincarle encima, el fuerte vampiro se levantó en todo su poderio, incluso Mairel habia preferido mantenerse callada - Descuidaste a una NIÑA en un lugar asi??!! - Rayne trató de ser sensata e hizo el intento de bajar los humos - Vale papi, tranquilo, que...-
- ME TRANQUILIZO NI POR MIL INFIERNOS!! - gritó de nuevo casi en un terrible rugido tenebroso, Mairel se aproximó con mucha cautela y tomandolo del brazo suavemente acaricio susurrando - mi amor, iremos por ella -
- No, ustedes no van a ningun lado - dijo entonces, mientras avanzaba, ya tenia su armadura, sus katanas y habia estado entrenando, con su bella hija Pilar, sus ojos rojos se fijaron en una pared donde estaba otra de sus espadas, con el simbolo del clan en ella, solo la usaba para ocaciones necesarias ,y ese momento...era necesario - Papá dejame ir contigo! - dijo Sara mientras se aproximaba, ya completamente armada hasta los dientes - pero Lord Vheilian la miro y agregó -...quedate, yo la traeré de vuelta - dijo firmemente mientras depositaba un beso en los labios de su amada Mairel, miró a los suyos, estaba seguro que ganaria por que Lord Raul, era un inexperto en todo en cuestiones de batalla- Pero era mejor si se iba solo, por que....
Por que esa noche Raul conoceria el deseo de no haber nacido, nisiquiera respirado.
Esa noche, el terror bajaria a la tierra en forma de Lord Vheilian....
Y Esa noche hasta la misma oscuridad temeria a su ira, si algun cabello de su nieta era separado de su cabezita...
------------------------------
Continuará xD........
No enserio, les dije que seria largo T-T
ya ya cuando regreso posteo la segunda parte xD
Los amo <3 y espero que vallan disfrutando :3
Una ira irrefrenable
Lord Vheilian jugaba con su nieta a las escondidas en los jardines del clan, ahora contaba hasta el 10, mientras que la niña que habia empezado a despertar emocionalmente y a familiarizarse con su nueva familia, se escondía mientras reia por lo bajo.
- 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10!!!! alli voy nieta hermosa! - dijo él sonriente, mientras se descubria los ojos y miraba alrededor, buscando a la pequeña, no podian creerlo, era facil preguntarse hace cuanto no habian visto a Lord Vheilian tan juguetón y pasar mas rato jugando con una niña que metido atendiendo asuntos del clan, desde que habia llegado la pequeña, los pasillos del clan se habian llenado de risas, y la voz encantadora de la curiosa Kirika que ahora, comenzaba a mostrar razgos de su personalidad, aflorando poco a poco, y su presencia se estaba reflejando en el humor de todos.
- Ayer tu padre me preguntó, si no seria lindo tener un bebé - dijo Lady Mairel, viendo la graciosa escena de su marido, buscando a la niña que se escondia proxima a el, en unos arbustos.
Esbozó una sutil sonrisa - Bueno, a mi me dieron ganas de tener un bebe - Dijo Carmilla quien ahora bebía un Bloody Mary, Rayne soltó una carcajada y dijo - ¿En esta temporada mami? - Mairel miró a su hija por un instante, y agregó con suavidad, volviendo a mirar a su esposo, que acababa de encontrar a la pequeña - tienes razón, en este momento de inestabilidad, lo que menos necesita el clan, son mujeres embarazadas - Sara que habia mantenido silencio, embelezada viendo lo hermosa que era su hija, seria capaz de matar por ella, amaba todo de ella, todo, incluyendo su incapacidad de llevar un vestido por mas de 20 minutos, y su aficion a tocar, agarrar, manipular, y encontar las armas del clan, todo apuntaba a que seria tal como su nombre lo decía, una guerrera del ocaso, sin embargo no podia mantenerla encerrada en el castillo del clan, Rigoberto habia sujerido ir a llevarla de paseo, pero ella no estaba convencida, aun asi, su hermano se la habia pasado todo el dia fregando sobre el dichoso paseo, asi que a fin de cuentas irian.
- Ya nos vamos hermanita - dijo Rigoberto, mientras se preparaba, acababa de llegar de hacer unos recados que su padre le habia encomendado, el muy despistado Rigo, se habia demorado ocho siglos, Sara sonrió algo no convencida agregando - esta bien hermano....- miró a su padre que ya se aproximaba con su pequeña nieta en sus brazos que se abrazaba fuertemente a el - ¿Ya se van? - preguntó Vheilian, mientras dejaba a la niña en el suelo, hizo pucheros, le dolia tener que dejarla ir, pero la verdad era que podria pasarse jugando con la pequeña sin cansarse - Sip ya nos vamos Pa´ , no te preocupes nos irá bien...- terminó Rigo mientras sonreia mas ampliamente, miró a su hermana Sara que ahora agachada acomodaba su abriguito con cuidado -...ya mi niña mosha vamos - sonrió con dulzura mientras la tomaba de la mano, avanzando, la pequeña se giró para ver a su abuelito y con una voz dulce y tierna sacudio su mano libre en el aire - Te amo awelito!!! - sonriendo, Vheilian, sonrió ante aquella despedida, despidiendose con la mano, su esposa Mairel, sonrió y abrazando a su esposo dijo - ya ya, vendran mas tarde y podran seguir jugando - él depositó un beso en los labios de su hermosa esposa, mujer de su corazon, uno de sus tantos tesoros, y mirandola con adoración la cargó en brazos, Rayne y Carmilla, se miraron riendo mucho, cuando su padre agregó - Mis amadas hijas....- una sonrisa picara se dibujo en sus labios -...Paf!!!...- exclamó divertido, y extendiendo sus alas, se llevó a su mujer, con ambicion, y una noche planeada meticulosamente para cero interrupciones -
----------------------------------------oOo----------------------------------------------------
Lord Raul estaba fastidiado, su esposa Lara se la habia pasado llorando toda la maldita tarde sin tregua, desde que se habian ido de su hogar, el sabia que ella habia abandonado a su hija, una hija humana, suspiró mientras pensaba, silencioso, su niña, podria ser humana, quizá no era vampiro, pero si podia servirle de garantía para la herencia de su padre, sin embargo no sabia como resultaria todo el asunto, ya que se habia enterado que la pequeña, estaba en manos de el clan Imperio Inmortal, miró el anillo carmín en su dedo anular, y suspiró, la hija de su sangre no habia resultado ser como ellos deseaban, pero aun asi les era util, tenia que recuperarla.
Habia escuchado hablar para entonces de un festival que se llevaria a cabo esa noche en el pueblo, no podian faltar los niños, y si Lord Vheilian habia sido tan sobreprotector como para reclamarla, como lo hizo, seguramente era lo suficientemente paternal para llevarla de paseo, o mandar a alguien con ella, asi que esbozando una sonrisa, miró el reloj, pensativo - Vladimir - dijo suavemente, el sirviente diestro en su trabajo, se apresuró a entrar a la habitacion - Prepara mi carruaje, esta noche...tenemos una mision...- el sirviente hizo una reverencia - Si mi señor - Lord Raul tomó su chaqueta y avanzó tomando su bastón de cedro, con el rubí en la empuñadura, saliendo con paso firme de la enorme habitacion victoriana.
------------------------------------oOo------------------------------------------
El festival era muy colorido, iban a haber atracciones de todo tipo, el circo tambien estaba alli, Rigo cargaba en sus hombros a la hermosa pequeña que miraba con fasinacion todo, las luces, las lamparas, todo llamaba su atencion, su madre ahora miraba de lado a lado, tensa, buscando peligro alguno que pudiese asechar, el clan estaba en un tiempo duro, en el que tenian que estar alertas, miró hacia su pequeña que parecia disfrutar de todo, la musica retumbaba en sus oidos, haciendola sonreir mas, ya habian estado caminando por un buen rato y Rigo parecia comenzar a distraerse con la nuevas cosas que habia, queria hechar un ojo, mientras tanto, Sara miró la hora, y agregó con suavidad- voy por algo para Kiri, hermano, debe tener hambre ya - Rigoberto sonrió mas y asintió - Anda hermana, yo la cuido - Sara lanzó una ultima mirada a su pequeña hija, y se retiró en busca de algo delicioso, para ella.
- A ver pequeña, veamos esta tienda, seguro encuentro algo genial para mi, y para ti - dijo al fin cediendo ante la tentacion de ver lo que habia de nuevo, sus ojos se enfocaron en unas nuevas camisas, sin embargo se dió cuenta que no podia hacer mucho con la pequeña en los hombros, asi que la bajó por un rato y sonriendo dijo - Quedate aqui de pie...si?, deja a tu tio Rigo ver algunas cosas - la niña se llevó un dedo a los labios y se quedó quieta, mientras miraba a todas las personas alrededor, fijando sus hermosos ojos avellana en todo, cuando los paso por la puerta, logró ver a alguien, una figura encapuchada, con una mascara de oro, que le habia hecho una seña de silencio, la pequeña y la persona, se miraron atentamente, este le hizo una seña para que se acercara, y eso hizo la niña mientras se aproximaba lentamente, miró una vez mas a su tio Rigo, que estaba entretenido viendo algunas cosas, cuando volvio sus ojos al frente, la figura estaba justo alli, delante, y tomandola en brazos, la cargó sacandola del local con rapidez...Lady Sara llegaba y pudo ver como una figura oscura se llevaba a la niña y lo que llevaba en las manos se le cayó gritando - KIRIKA!!!!!!!!!!!!!!.....- Rigoberto casi se cae del susto, miró alrededor, sip, estaba fregado, total y completamente fregado, se habia distraido y se habian llevado a su sobrina, y su madre habia empezado a correr en una persecucion completamente salvaje, corrió tras ella, mientras comenzaba a sentir que deberian llamar a su padre, alguien estaria enojado, muy enojado, Lady Sara se detuvo en seco, las figuras del festival, todas las mismas, trató de guiarse por el aroma de su pequeña pero habia demasiados, todo era caos, la gente no la dejó moverse rapido, con una ira irrefrenable, corrió hacia un callejón y sacando sus alas, que al salir rasgaron la tela de su ropa, y sobrevoló todo, pero ya era tarde, se la habian llevado, a lo lejos divisó el carruaje, y pudo detectar en el a su niña, su niña estaba alli, no tenia sus armas, pero era suya...su nena, cuando iba a contra atacar, Rigoberto la llamó gritandole:
-Sara!!....baja de una vez, estas desarmada, no podemos hacer nada, llamemos a papá, el sabra que hacer - Sara miró el carruaje, luego a su hermano, ir desarmada, aunque tuviera sus poderes, igual era riesgozo, maldijo por lo bajo y bajó cayendo al suelo de pie, enojada se alejó de su hermano, pero el tenia razón, su corazon comenzó a latir veloz, asustada, preocupada.
Quien haya osado raptar a su niña, iba a morir, de la forma mas terrible existente.
Lord Raul, no era ningún idiota, y sabia que habia provocado la ira de Lady SaraEvy, lo cual era sinonimo de muerte, habia secuestrado a su hija, de las manos de su nueva familia, y el rostro de Lord Vheilian seria lo ultimo que veria antes de dejar el mundo de los no-vivos - Cain...me libre - dijo suavemente viendo a la criatura dormida cubierta por la sabana, en el carruaje camino a su castillo, suspiró mirando las luces de la ciudad alejandose, luego a la pequeña, tenia tantas ganas de incarle el diente, pero era su hija, y el jamás habia tenido amor paternal, para el, ella era una niña humana, sabria bien, retiró la vista de la criatura mientras trataba de relajarse, pese a saber que si n actuaba rapidamente, se veria en un aprieto del cual solo saldria en ataud.
-------------------------------------oOo-------------------------------------------------
- QUE QUE??!!!!!! - gritó Lord Vheilian levantandose de golpe, Rigoberto algo palido no podia creer que su padre estuviese al borde de brincarle encima, el fuerte vampiro se levantó en todo su poderio, incluso Mairel habia preferido mantenerse callada - Descuidaste a una NIÑA en un lugar asi??!! - Rayne trató de ser sensata e hizo el intento de bajar los humos - Vale papi, tranquilo, que...-
- ME TRANQUILIZO NI POR MIL INFIERNOS!! - gritó de nuevo casi en un terrible rugido tenebroso, Mairel se aproximó con mucha cautela y tomandolo del brazo suavemente acaricio susurrando - mi amor, iremos por ella -
- No, ustedes no van a ningun lado - dijo entonces, mientras avanzaba, ya tenia su armadura, sus katanas y habia estado entrenando, con su bella hija Pilar, sus ojos rojos se fijaron en una pared donde estaba otra de sus espadas, con el simbolo del clan en ella, solo la usaba para ocaciones necesarias ,y ese momento...era necesario - Papá dejame ir contigo! - dijo Sara mientras se aproximaba, ya completamente armada hasta los dientes - pero Lord Vheilian la miro y agregó -...quedate, yo la traeré de vuelta - dijo firmemente mientras depositaba un beso en los labios de su amada Mairel, miró a los suyos, estaba seguro que ganaria por que Lord Raul, era un inexperto en todo en cuestiones de batalla- Pero era mejor si se iba solo, por que....
Por que esa noche Raul conoceria el deseo de no haber nacido, nisiquiera respirado.
Esa noche, el terror bajaria a la tierra en forma de Lord Vheilian....
Y Esa noche hasta la misma oscuridad temeria a su ira, si algun cabello de su nieta era separado de su cabezita...
------------------------------
Continuará xD........
No enserio, les dije que seria largo T-T
ya ya cuando regreso posteo la segunda parte xD
Los amo <3 y espero que vallan disfrutando :3
domingo, 23 de enero de 2011
Zeus En El Cielo Por Vheilian Sagara Parte 2
Esta parte va dedicada para mi querida amiga, Lady Prix, Te Extrañaremos siempre amiga.
El frio lo lleno por todo su cuerpo, su respiración fue controlada por su instinto natural de lucha, el miedo tiene que irse lejos, el valor y la confianza tenían que ser sus compañeros hoy, el resultado de su encuentro con los dioses del Olimpo este día estaban a punto de entrar cruzo aquella puerta y llego justo hasta donde unas escaleras en descenso lo llevaban hasta una especie de portal, la figura oscura de un ser encapuchado le dio la bienvenida extendiendo su mano sin mirarle, lord vheilian coloco dos dragmas en sus manos, aquella criatura al recibir el pago le dio paso al portal fue absorbido por el por un instante sintió que su cuerpo se desvanecía en la nada y cerro sus ojos y se dejo llevar por aquello, su llegada fue abrupta sintió el golpe seco en el suelo pero no hubo dolor, quito la máscara que protegía su boca y se levanto, una olfateada al lugar, ese lugar esa frio, aun no llegaba, noto un puente más adelante que se levantaba entre dos montañas suspiro y continuo caminando inmerso en el recuerdo de su nacimiento como semidiós -hoy es el gran día amigo- dijo emocionado arles – no estoy seguro de esto arles, de verdad no estoy seguro de esto – la preocupación de vheilian era comprensible, más que a nada en el mundo amaba a su familia, no sabía como tomarían el hecho de que él se adentrara en aquel mundo y mucho menos sabia como tomarían el hecho de que ahora el seria un semidiós, temía la reacción de su propio padre, ¿le decepcionaría? Sabía sobre todas las cosas que no buscaba aquel poder, pero había encontrado un maravilloso amigo y quería luchar con él al mismo nivel, los dos esperaban en el centro de la arena impacientes – Vheilian amigo, no quisiera que le dieras gusto a Zeus, pero también se, el amor que sientes por tu familia, esto podría beneficiarte en maneras que no imaginas, aun que no se qué intensiones tiene mi padre contigo, se que tiene el poder de volverte un semidiós sin necesidad de ser hijo de algún dios, pero no se que con que propósito – la conversación fue interrumpida por una serie de cosas, el cielo se nublo y una tormenta comenzó a caer, vheilian y arles se quedaron inmóviles en el centro de la arena, 5 criaturas de aproximadamente 3 metros rodearon los cuerpos de Arles y Vheilian, ambos se pusieron en alerta pero no atacaron, las figuras de estos seres eran humanas pero una larga túnica blanca y una capucha no les permitían verlos uno de aquellos seres golpeo el cuerpo de arles enviándolo lejos, las cinco figuras descubrieron sus capuchas, cinco rostros se mostraron ante el rodeándolo y cubriéndolo con una especia de protección arles desesperado golpeaba aquella esfera – NO MALDITA SEA NO- gritaba con desesperación la figura del centro, un rostro frio, sus ojos azules le miraron, aquel tenía una especie de tatuaje en su frente una especie de tridente, justo al notar la forma de aquel tatuaje fue impactado en su rostro por el puño de este, haciéndolo tambalear fue recibido por una patada en su espalda que le hizo ir al frente y recibió otro impacto de aquel ser de ojos azules esta vez en su quijada se movió de lado derecho y un golpe en sus costillas por otro de aquellos seres, una golpiza brutal ante los ojos de su amigo impotente por no poder hacer nada –MALDITA SEA POSEIDON DEJALO EN PAZ, APOLO MALDITO DEJA QUE PUEDA ENTRAR – los gritos de arles fueron ignorados, cada golpe, cada patada eran recibidos en el cuerpo de vheilian el cual sufría los embates sin piedad de aquellos que sabia ahora eran dioses – por eso duelen mucho mas sus golpes- pensó al sentir una patada en su boca, su cuerpo ya en el suelo, no podía hacer nada por defenderse, sentía todas sus costillas rotas y no taba su boca reventada por la violencia de aquellos golpes, de pronto el cielo se hizo un estruendo y por un instante lord vheilian sintió la gravedad de sus heridas –moriré- pensó con temor, la carcajada de zeus se escucho en todo lo alto, aquel gigante bajaba del cielo seguro de si mismo al llegar al suelo era de un tamaño relativamente normal, arles se fue sobre él con furia pero fue detenido en su intento nuevamente por un dedo de este – ARLES ¿QUE NO ENTIENDES QUE ESTO ES NECESARIO?- le dijo al tiempo que sonreía al ver el cuerpo mal herido de vheilian –mi pregunta es muchacho ¿acaso un vampiro no presume de la vida eterna? – aquel tono en su voz le molestaba por mucho a vheilian, sintió una punzada en su cerebro y escucho claramente el sonido de una de sus costillas romperse por su intento inútil de levantarse, boca abajo en el suelo se sentía impotente, zeus se acerco y se agacho tomándolo de los cabellos y levantado su mirada –MIRATE NADA MAS MI HERMOSO VAMPIRO GUERRERO, COMO HAZ QUEDADO – aquel tono en su voz esta vez con algo de sorna en su voz, el dios, trono sus dedos y el cuerpo de vheilian se levanto de apoco dejándolo suspendido solo unos centímetros del suelo, su cuerpo le gritaba el dolor que sentía no tenia mas fuerzas para articular alguna palabra, sin previo aviso Zeus metió sus manos en su corazón, como si no existiera piel o hueso alguno saco su corazón, lord vheilian se conmociono al ver ese órgano fuera de su cuerpo, pero la mirada de Zeus era diferente, estaba sorprendido el corazón de lord vheilian era sano, latía, y tenía un brillo plateado muy peculiar -¿UN VAMPIRO PUEDE AMAR TAN INTENSAMENTE?- aquel dios no podía creerlo, presiono el corazón en sus manos y vheilian sintió morir –YA BASTA- grito arles, se había zafado de aquel hechizo y atacaba a su padre con violencia, los cinco dioses lo detuvieron justo a tiempo, pero no le hicieron daño, vheilian noto frenesí en la mirada de su amigo pero el dolor aquel era insoportable, Zeus presiono mas aquel corazón incrustando uno de sus dedos, los gritos de desesperación y dolor de lord vheilian eran intensos aquel dios no tenia piedad por que introdujo mas aquel dedo y pronuncio algo que no entendió, perdió el conocimiento, su amigo lo llevaba en brazos, aquella risa de Zeus en sus oídos no le dejaba en paz – Resiste vheilian, resiste amigo por favor- el tono preocupado de arles, perdió el conocimiento una vez mas estaba en el hogar de su padre, el lugar donde creció, sintió el frio del suelo, su sangre saliendo de el - ¿TESORO?- la voz de su madre lo despertó – fíjate que tu tía – la sorpresa en su rostro al notar el cuerpo de su hijo fue brutal - ¿mi tesoro estas bien?- su madre nunca pasaba por los territorios de su padre pero noto la presencia de su hijo, se acerco presurosa – Madre estoy bien por favor vete antes de que llegue mi padre- dijo vheilian con autoridad en su voz - ¿Cómo me pides eso mírate como estas?- intento levantarse pero no pudo, rayne su hija llego aquel lugar - ¿padre que sucede?- aquella hija suya tenia la habilidad de encontrarle siempre se acerco al cuerpo de su padre giro su cuerpo colocando su cabeza en sus rodillas y acaricio su pelo, aquella gatita o algo le dio por que empezó a lamer llorando las heridas de su padre, su armadura no existía, 4 heridas abiertas en su pecho, sus pómulos destrozados su boca hecha pedazos en su corazón solo pedía la llegada de su padre y llego, lord calandraco apareció en la escena se escucharon sus pies firmes en aterrizaje perfecto – Buenas Lunas Familia – dijo, la mirada suplicante de su ex mujer y su nieta se clavaron en el, noto el cuerpo sangrante de su hijo salto hasta la planta alta y se sentó en su trono chasqueo los dedos y dijo a su hijo –SABES QUE HACER VHEILIAN- y se quedo hay esperando, vheilian sintió tanta desesperación y vergüenza se levanto con sus heridas y salió del lugar, desapareció el seco – Paf!- característico de él se escucho.
Justo a mitad de aquel puente lloro por recordar ese día, sentía que había defraudado a su padre, por eso no pudo hacer más que salir, Sara lo encontró mal herido en el bosque de su padre temblando de frio y se encargo de su padre, continuo caminando y decidió probar su velocidad, noto las espadas en su espalda, en su cintura y las dagas en su cuerpo bien seguras, corrió por aquel puente dando saltos hasta llegar al otro extremo se detuvo justo enfrente de un portal y en el arco logro leer “PUERTA DE LO DIVINO ¿SERA TU MUERTE ACASO?” él sabía bien, de no ser por su condición de semidiós moriría al pasar aquel portal, cruzo con determinación, aquella era la imagen que le conmovió aquel primer día, se sumergió en sus recuerdos una vez más, -Esto es el Olimpo amigo mío- le dijo la voz emocionada de arles habían pasado un par de días de aquella locura, le explico que como el ritual vampírico su cuerpo tenía que estar a punto de morir, vheilian quedo embelesado, justo después de cruzar el portal una escalera les dirigía camino arriba hasta una montaña en donde un palacio coronaba aquella punta, todo aquel lugar era brillante y hermoso, los pilares en cada lado de oro puro he incrustaciones de diamante, pudo notar la escalera también estaba hecha de oro y detalles en plata, subieron por aquella escalera lentamente mientras arles le mostraba todo el lugar – aquella casa de allá, hay vive apolo el hdp que te golpeo junto con poseidon, ermes, efesto y dioniso – llegaron hasta el palacio principal la figura de Zeus los recibió con una sonrisa, gigante como siempre mostrando sus grotescos rasgos, arles golpeo el hombro de vheilian y los dos se hicieron gigantes, arles tomo posición en uno de los tronos dejando a vheilian en el centro observado por 8 figuras incluyendo la de Zeus que le miraba con deseo esta vez – LA DIVINIDAD TE FAVORESE VHEILIAN- chasqueo sus dedos y en la espalda vhelian pudo sentir un par de alas blancas hermosas junto con aquel brillo en su rostro que le daba ahora la capacidad de ser semidiós, su pulcra armadura blanca le daba un toque excitante a la figura de aquel vampiro y esto tenia emocionado a zeus –HE DECIDO QUERIDOS AMIGOS NOMBRA A VHEILIAN DIOS – los reclamos no se hicieron esperar hades brinco –HERMANO SE QUE ERES AMANTE DE LOS HERMOSO PERO ESTO ES UNA ESTUPIDES ESE SER ES UN VAMPIRO Y TE HA DEMOSTRADO QUE PUEDE AMAR A PESAR DE LO QUE SABEMOS DE ELLOS- arles pego en el cuelo con su espada con ira - ¿ESTAS LOCO? EL TIENE FAMILIA PADRE, AMA A SU FAMILIA- Zeus miro directo a los ojos a vheilian - no son más que estorbos que se pueden eliminar ¿no es así vheilian? – vheilian presiono sus puños y dio media vuelta –DETENTE- grito Zeus con autoridad pero vheilian continuo caminando levantando su voz – AMO A MI FAMILIA TAN INTENSAMETNE QUE NI SIQUIERA POR EL PODER MAS GRANDIOSO DE ESTE MUNDO LA CAMBIARIA – determinación y amor por su familia salió de aquel lugar saltando bajo el tamaño de su cuerpo y se dirigió a un lugar donde pensar llego hasta aquel lugar que amaba el bosque artico que tanto amaba, el frio en su piel, suspiro pensando en aquellas necias palabras de Zeus –AMI NADIE ME DEJA HABLANDO SOLO- la voz en el cielo era la de Zeus - ¿ACASO TE CREES SUPERIOR AMI?- 5 rayos cayeron donde estaba eran las figuras de aquellos dioses de la ves pasada, esta vez las cosas eran diferentes vheilian pudo luchar como un igual, la locura de la batalla, el filo de su espada cortaba las ropas de aquellos seres que venían al ataque una vez mas, Poseidon con su risa estúpida al impactar el mentón de vheilian, -¿ERES SEMIDIOS RECUERDAS ESTUPIDO?- la locura de la batalla le recordó su familia tenía todo el sentido, el amor de su familia, el amor de todos aquellos que amaba, tomo una daga de su espalda he invistió el cuerpo de apolo sin poder pegar a su objetivo , era un locura aquello cinco cuerpos en contra de su figura en aquel lugar frio y desolado pero la superioridad numérica pudo mas, aun con la llegada abrupta de arles, fue demasiado tarde, vheilian se encontró de nuevo siendo golpeado brutalmente en aquel lugar, un rayo del cielo impacto el cuerpo de arles el cual cayo inconsciente al instante, vheilian, recordó la mirada de sara en sus ojos una súplica no mueras papi, rayne su preciosa hija, leydy y su sonrisa, aschly y su locura, pilar y su hermosa voz, carmilla y su dulce presencia, cada uno de sus hijos e hijas le pasaron por la mente –SERAS MIO VHEILIAN ASI TENGA QUE MATAR A CADA VAMPIRO SOFRE LA FAZ DE LA TIERRA- cinco pies sumieron su cráneo en la nieve una vez más su cuerpo sangraba y la desesperación lleno su alma, cayo inconciente, - PADRE, PAPITO POR FAVOR- la voz de sara le despertó, sintió sus lagrimas en su rostro abrió los ojos y la mirada angustiada de su pequeña le recibió de nuevo – Sara mi preciosa – dijo el apenas en un sollozó –padre resiste por favor – la chica corto su muñeca y le dio de beber a su padre – NO TE ATREVAS A DECIRME QUE NO!- le dijo con decisión, vheilian tomo de su sangre llenándose de energía – al menos me mantuvo con vida- pensó de regreso a aquella escena, subía con decisión por aquella escalera larga y miraba directo al palacio en la punta de aquella montaña – es hora vheilian aquí termina todo – dijo al sentir una brisa en su cara y aferrarse al amor de su familia para entrar a la que tal vez sería su última batalla.
El frio lo lleno por todo su cuerpo, su respiración fue controlada por su instinto natural de lucha, el miedo tiene que irse lejos, el valor y la confianza tenían que ser sus compañeros hoy, el resultado de su encuentro con los dioses del Olimpo este día estaban a punto de entrar cruzo aquella puerta y llego justo hasta donde unas escaleras en descenso lo llevaban hasta una especie de portal, la figura oscura de un ser encapuchado le dio la bienvenida extendiendo su mano sin mirarle, lord vheilian coloco dos dragmas en sus manos, aquella criatura al recibir el pago le dio paso al portal fue absorbido por el por un instante sintió que su cuerpo se desvanecía en la nada y cerro sus ojos y se dejo llevar por aquello, su llegada fue abrupta sintió el golpe seco en el suelo pero no hubo dolor, quito la máscara que protegía su boca y se levanto, una olfateada al lugar, ese lugar esa frio, aun no llegaba, noto un puente más adelante que se levantaba entre dos montañas suspiro y continuo caminando inmerso en el recuerdo de su nacimiento como semidiós -hoy es el gran día amigo- dijo emocionado arles – no estoy seguro de esto arles, de verdad no estoy seguro de esto – la preocupación de vheilian era comprensible, más que a nada en el mundo amaba a su familia, no sabía como tomarían el hecho de que él se adentrara en aquel mundo y mucho menos sabia como tomarían el hecho de que ahora el seria un semidiós, temía la reacción de su propio padre, ¿le decepcionaría? Sabía sobre todas las cosas que no buscaba aquel poder, pero había encontrado un maravilloso amigo y quería luchar con él al mismo nivel, los dos esperaban en el centro de la arena impacientes – Vheilian amigo, no quisiera que le dieras gusto a Zeus, pero también se, el amor que sientes por tu familia, esto podría beneficiarte en maneras que no imaginas, aun que no se qué intensiones tiene mi padre contigo, se que tiene el poder de volverte un semidiós sin necesidad de ser hijo de algún dios, pero no se que con que propósito – la conversación fue interrumpida por una serie de cosas, el cielo se nublo y una tormenta comenzó a caer, vheilian y arles se quedaron inmóviles en el centro de la arena, 5 criaturas de aproximadamente 3 metros rodearon los cuerpos de Arles y Vheilian, ambos se pusieron en alerta pero no atacaron, las figuras de estos seres eran humanas pero una larga túnica blanca y una capucha no les permitían verlos uno de aquellos seres golpeo el cuerpo de arles enviándolo lejos, las cinco figuras descubrieron sus capuchas, cinco rostros se mostraron ante el rodeándolo y cubriéndolo con una especia de protección arles desesperado golpeaba aquella esfera – NO MALDITA SEA NO- gritaba con desesperación la figura del centro, un rostro frio, sus ojos azules le miraron, aquel tenía una especie de tatuaje en su frente una especie de tridente, justo al notar la forma de aquel tatuaje fue impactado en su rostro por el puño de este, haciéndolo tambalear fue recibido por una patada en su espalda que le hizo ir al frente y recibió otro impacto de aquel ser de ojos azules esta vez en su quijada se movió de lado derecho y un golpe en sus costillas por otro de aquellos seres, una golpiza brutal ante los ojos de su amigo impotente por no poder hacer nada –MALDITA SEA POSEIDON DEJALO EN PAZ, APOLO MALDITO DEJA QUE PUEDA ENTRAR – los gritos de arles fueron ignorados, cada golpe, cada patada eran recibidos en el cuerpo de vheilian el cual sufría los embates sin piedad de aquellos que sabia ahora eran dioses – por eso duelen mucho mas sus golpes- pensó al sentir una patada en su boca, su cuerpo ya en el suelo, no podía hacer nada por defenderse, sentía todas sus costillas rotas y no taba su boca reventada por la violencia de aquellos golpes, de pronto el cielo se hizo un estruendo y por un instante lord vheilian sintió la gravedad de sus heridas –moriré- pensó con temor, la carcajada de zeus se escucho en todo lo alto, aquel gigante bajaba del cielo seguro de si mismo al llegar al suelo era de un tamaño relativamente normal, arles se fue sobre él con furia pero fue detenido en su intento nuevamente por un dedo de este – ARLES ¿QUE NO ENTIENDES QUE ESTO ES NECESARIO?- le dijo al tiempo que sonreía al ver el cuerpo mal herido de vheilian –mi pregunta es muchacho ¿acaso un vampiro no presume de la vida eterna? – aquel tono en su voz le molestaba por mucho a vheilian, sintió una punzada en su cerebro y escucho claramente el sonido de una de sus costillas romperse por su intento inútil de levantarse, boca abajo en el suelo se sentía impotente, zeus se acerco y se agacho tomándolo de los cabellos y levantado su mirada –MIRATE NADA MAS MI HERMOSO VAMPIRO GUERRERO, COMO HAZ QUEDADO – aquel tono en su voz esta vez con algo de sorna en su voz, el dios, trono sus dedos y el cuerpo de vheilian se levanto de apoco dejándolo suspendido solo unos centímetros del suelo, su cuerpo le gritaba el dolor que sentía no tenia mas fuerzas para articular alguna palabra, sin previo aviso Zeus metió sus manos en su corazón, como si no existiera piel o hueso alguno saco su corazón, lord vheilian se conmociono al ver ese órgano fuera de su cuerpo, pero la mirada de Zeus era diferente, estaba sorprendido el corazón de lord vheilian era sano, latía, y tenía un brillo plateado muy peculiar -¿UN VAMPIRO PUEDE AMAR TAN INTENSAMENTE?- aquel dios no podía creerlo, presiono el corazón en sus manos y vheilian sintió morir –YA BASTA- grito arles, se había zafado de aquel hechizo y atacaba a su padre con violencia, los cinco dioses lo detuvieron justo a tiempo, pero no le hicieron daño, vheilian noto frenesí en la mirada de su amigo pero el dolor aquel era insoportable, Zeus presiono mas aquel corazón incrustando uno de sus dedos, los gritos de desesperación y dolor de lord vheilian eran intensos aquel dios no tenia piedad por que introdujo mas aquel dedo y pronuncio algo que no entendió, perdió el conocimiento, su amigo lo llevaba en brazos, aquella risa de Zeus en sus oídos no le dejaba en paz – Resiste vheilian, resiste amigo por favor- el tono preocupado de arles, perdió el conocimiento una vez mas estaba en el hogar de su padre, el lugar donde creció, sintió el frio del suelo, su sangre saliendo de el - ¿TESORO?- la voz de su madre lo despertó – fíjate que tu tía – la sorpresa en su rostro al notar el cuerpo de su hijo fue brutal - ¿mi tesoro estas bien?- su madre nunca pasaba por los territorios de su padre pero noto la presencia de su hijo, se acerco presurosa – Madre estoy bien por favor vete antes de que llegue mi padre- dijo vheilian con autoridad en su voz - ¿Cómo me pides eso mírate como estas?- intento levantarse pero no pudo, rayne su hija llego aquel lugar - ¿padre que sucede?- aquella hija suya tenia la habilidad de encontrarle siempre se acerco al cuerpo de su padre giro su cuerpo colocando su cabeza en sus rodillas y acaricio su pelo, aquella gatita o algo le dio por que empezó a lamer llorando las heridas de su padre, su armadura no existía, 4 heridas abiertas en su pecho, sus pómulos destrozados su boca hecha pedazos en su corazón solo pedía la llegada de su padre y llego, lord calandraco apareció en la escena se escucharon sus pies firmes en aterrizaje perfecto – Buenas Lunas Familia – dijo, la mirada suplicante de su ex mujer y su nieta se clavaron en el, noto el cuerpo sangrante de su hijo salto hasta la planta alta y se sentó en su trono chasqueo los dedos y dijo a su hijo –SABES QUE HACER VHEILIAN- y se quedo hay esperando, vheilian sintió tanta desesperación y vergüenza se levanto con sus heridas y salió del lugar, desapareció el seco – Paf!- característico de él se escucho.
Justo a mitad de aquel puente lloro por recordar ese día, sentía que había defraudado a su padre, por eso no pudo hacer más que salir, Sara lo encontró mal herido en el bosque de su padre temblando de frio y se encargo de su padre, continuo caminando y decidió probar su velocidad, noto las espadas en su espalda, en su cintura y las dagas en su cuerpo bien seguras, corrió por aquel puente dando saltos hasta llegar al otro extremo se detuvo justo enfrente de un portal y en el arco logro leer “PUERTA DE LO DIVINO ¿SERA TU MUERTE ACASO?” él sabía bien, de no ser por su condición de semidiós moriría al pasar aquel portal, cruzo con determinación, aquella era la imagen que le conmovió aquel primer día, se sumergió en sus recuerdos una vez más, -Esto es el Olimpo amigo mío- le dijo la voz emocionada de arles habían pasado un par de días de aquella locura, le explico que como el ritual vampírico su cuerpo tenía que estar a punto de morir, vheilian quedo embelesado, justo después de cruzar el portal una escalera les dirigía camino arriba hasta una montaña en donde un palacio coronaba aquella punta, todo aquel lugar era brillante y hermoso, los pilares en cada lado de oro puro he incrustaciones de diamante, pudo notar la escalera también estaba hecha de oro y detalles en plata, subieron por aquella escalera lentamente mientras arles le mostraba todo el lugar – aquella casa de allá, hay vive apolo el hdp que te golpeo junto con poseidon, ermes, efesto y dioniso – llegaron hasta el palacio principal la figura de Zeus los recibió con una sonrisa, gigante como siempre mostrando sus grotescos rasgos, arles golpeo el hombro de vheilian y los dos se hicieron gigantes, arles tomo posición en uno de los tronos dejando a vheilian en el centro observado por 8 figuras incluyendo la de Zeus que le miraba con deseo esta vez – LA DIVINIDAD TE FAVORESE VHEILIAN- chasqueo sus dedos y en la espalda vhelian pudo sentir un par de alas blancas hermosas junto con aquel brillo en su rostro que le daba ahora la capacidad de ser semidiós, su pulcra armadura blanca le daba un toque excitante a la figura de aquel vampiro y esto tenia emocionado a zeus –HE DECIDO QUERIDOS AMIGOS NOMBRA A VHEILIAN DIOS – los reclamos no se hicieron esperar hades brinco –HERMANO SE QUE ERES AMANTE DE LOS HERMOSO PERO ESTO ES UNA ESTUPIDES ESE SER ES UN VAMPIRO Y TE HA DEMOSTRADO QUE PUEDE AMAR A PESAR DE LO QUE SABEMOS DE ELLOS- arles pego en el cuelo con su espada con ira - ¿ESTAS LOCO? EL TIENE FAMILIA PADRE, AMA A SU FAMILIA- Zeus miro directo a los ojos a vheilian - no son más que estorbos que se pueden eliminar ¿no es así vheilian? – vheilian presiono sus puños y dio media vuelta –DETENTE- grito Zeus con autoridad pero vheilian continuo caminando levantando su voz – AMO A MI FAMILIA TAN INTENSAMETNE QUE NI SIQUIERA POR EL PODER MAS GRANDIOSO DE ESTE MUNDO LA CAMBIARIA – determinación y amor por su familia salió de aquel lugar saltando bajo el tamaño de su cuerpo y se dirigió a un lugar donde pensar llego hasta aquel lugar que amaba el bosque artico que tanto amaba, el frio en su piel, suspiro pensando en aquellas necias palabras de Zeus –AMI NADIE ME DEJA HABLANDO SOLO- la voz en el cielo era la de Zeus - ¿ACASO TE CREES SUPERIOR AMI?- 5 rayos cayeron donde estaba eran las figuras de aquellos dioses de la ves pasada, esta vez las cosas eran diferentes vheilian pudo luchar como un igual, la locura de la batalla, el filo de su espada cortaba las ropas de aquellos seres que venían al ataque una vez mas, Poseidon con su risa estúpida al impactar el mentón de vheilian, -¿ERES SEMIDIOS RECUERDAS ESTUPIDO?- la locura de la batalla le recordó su familia tenía todo el sentido, el amor de su familia, el amor de todos aquellos que amaba, tomo una daga de su espalda he invistió el cuerpo de apolo sin poder pegar a su objetivo , era un locura aquello cinco cuerpos en contra de su figura en aquel lugar frio y desolado pero la superioridad numérica pudo mas, aun con la llegada abrupta de arles, fue demasiado tarde, vheilian se encontró de nuevo siendo golpeado brutalmente en aquel lugar, un rayo del cielo impacto el cuerpo de arles el cual cayo inconsciente al instante, vheilian, recordó la mirada de sara en sus ojos una súplica no mueras papi, rayne su preciosa hija, leydy y su sonrisa, aschly y su locura, pilar y su hermosa voz, carmilla y su dulce presencia, cada uno de sus hijos e hijas le pasaron por la mente –SERAS MIO VHEILIAN ASI TENGA QUE MATAR A CADA VAMPIRO SOFRE LA FAZ DE LA TIERRA- cinco pies sumieron su cráneo en la nieve una vez más su cuerpo sangraba y la desesperación lleno su alma, cayo inconciente, - PADRE, PAPITO POR FAVOR- la voz de sara le despertó, sintió sus lagrimas en su rostro abrió los ojos y la mirada angustiada de su pequeña le recibió de nuevo – Sara mi preciosa – dijo el apenas en un sollozó –padre resiste por favor – la chica corto su muñeca y le dio de beber a su padre – NO TE ATREVAS A DECIRME QUE NO!- le dijo con decisión, vheilian tomo de su sangre llenándose de energía – al menos me mantuvo con vida- pensó de regreso a aquella escena, subía con decisión por aquella escalera larga y miraba directo al palacio en la punta de aquella montaña – es hora vheilian aquí termina todo – dijo al sentir una brisa en su cara y aferrarse al amor de su familia para entrar a la que tal vez sería su última batalla.
sábado, 22 de enero de 2011
Zeus En El Cielo Por Vheilian Sagara Parte 1
En ese instante en la mente de lord Vheilian pasaban muchas cosas a la vez, el viento en su cara la fresca brisa le traía el recuerdo de hacia tan solo unos instantes – confiamos en ti papi sabemos que volverás – dijo la voz de Carmilla escondiendo su mirada para que no notara los ojos cristalinos a punto de llorar – eres el mejor guerrero que conozco papito, dales duro- Sara conmocionada por la notica miraba con tristeza a su padre, su mujer sin decir nada, el bulto en su vientre por el embarazo le hacía ver más linda, para él esa mujer esa su vida misma, separarse de ella con la incertidumbre de que tal vez no volvería le hacía desfallecer en el instante mismo de perderse en su mirada, bajo del segundo piso del castillo rápidamente, la bella alfombra roja colocada con delicadeza sobre cada escalón le daba paso rápido al encuentro de lo que tal vez sería su propia muerte –Awelito- la voz de su nieta detrás de el le hizo detenerse en el último escalón, la pequeña niña clavo sus ojos en el, esa mirada tan parecida a la suya, -te amo awelito por favor vuelve- dijo la pequeña nuevamente aferrándose a su pierna, el tomo sus manitas y se arrodillo al escalón, miro a la pequeña con amor y sonrió para ella, tratando de calmarla – te amo kirika no lo olvides – dejo a la pequeña en aquel escalón sintiendo no poderle decir más.
La noche era fría y el sonido de las alas de lord Vheilian se propagaba por el aire, pero solo la luna era testigo esa noche del trayecto de aquel vampiro, toda su vida se resumía a esa noche, todo por lo que vivía estaba a punto de serle arrebatado pero pelearía, como nunca antes y moriría defendiendo a los suyos, a los que amaba con locura, hacia un par de meses que lord Vheilian conoció la entrada a un mundo lleno de poder y grandeza, la belleza de aquel lugar cautivo su corazón toreador como pocas cosas antes en la vida –esa será la eterna debilidad de los que son como yo- pensó al surtir una onda gélida en su rostro, sumergido en los recuerdos de aquel encuentro que cambiaría su vida de una manera intensa, continuo surcando el cielo en dirección a su cita – Eternas Lunas – dijo lord Vheilian al entrar en aquel salón, el piso recién pulido de ónix le permitía ver su reflejo al caminar, noto lo silueta de un ser más adelante, pero no podía sentir su esencia, estaba pues ante algo desconocido para él, -Bienvenido ¿dígame que puedo hacer por usted? – la voz de aquel ser llegaba directo a su corazón, hipnotizándolo por completo, se acerco un poco temeroso, era lord vheilian, no podía sentir miedo, pero sin embargo la presencia de aquel ser le intimidaba por algún motivo –Solo ando de visita ¿disculpe cual es su nombre?- aquel ser dio vuelta y sus ojos se clavaron en los de lord vheilian, su mirada intensa, esos ojos rojos y una mirada intensa y segura, aquel rostro tan perfecto era adornado con una abundante cabellera hasta su espalda, - Mi nombre es Arles, también conocido como Ares dios de la guerra- pocas veces en su vida había tenido la necesidad de arrodillarse, pero esa noche no pudo hacer otra cosa, aquella conversación esa noche los uniría de una forma intensa, si algo disfrutaba lord vheilian era la lucha, era un toreador digno de llamarse así, pero el arte de el era la lucha y le gustaba ser un buen guerrero, la plática con aquel dios fue algo intenso, le conto la historia de su vida, sus batallas, se mostros sorprendido por el desprecio de su padre Zeus por ser un loco sediento de sangre y de lucha, pero él era así, también le comento que si bien era un dios, su cuerpo podía sentir dolor y muchas veces sus gritos fueron escuchados por toda la humanidad, durante los siguientes días lord vheilian fue invitado en aquel lugar, la arena era algo impresionante, los entrenamientos diarios daban paso a luchas tan fantásticas, lord vheilian se sentía feliz, la capacidad de lucha de arles era tal que a veces ni podía tocarlo, el palacio era algo impresionante, armaduras negras y rojas decoraban los pasillos del lugar, todo tenía que ver con la guerra y con la lucha, había tanta conexión entre ellos dos, que parecía como si fueran hermanos gemelos, se entendían ten perfectamente una ocasión mientras entrenaban con dos de los vástagos de Arles, fobos y deimos estos quedaron tan sorprendidos de la coordinación de ambos que se prometieron nunca más luchar con ellos dos juntos.
Volvió de sus recuerdos para descansar un poco, a esa altura pudo ver como una chica caminaba por un camino de terracería en medio de la nada, compadeció por un minuto a la chica, que mala fortuna de aquella mujer que sin pensarlo sería la cena de un vampiro esa noche, se lanzo sobre su víctima como odiaba esa parte de ser un vampiro con violencia llego por espalda la tomo por su cabello y ataco con violencia su cuello bebiendo de ella la chica era débil pero virgen, el dulce sabor de su sangre le lleno por completo el cuerpo noto como su corazón dejaba de latir, soltó su cuerpo y ella cayó al piso de lleno un golpe seco en la tierra, hizo lo que siempre hacia con todas sus víctimas, era un ritual personal, algo que no podía evitar, se agacho cerca del cuerpo de la chica y acomodo su cabello y sus manos como si durmiera, la miro por un instante –lo siento- dijo con tristeza y emprendió el vuelo nuevamente, aquello era algo que detestaba en gran manera, pero era una parte de ser vampiro y lo cumplía, es por eso que no le gustaba salir de casería con su familia, prefería cazar a solas que nadie viera esa parte de él que le avergonzaba.
Inmerso en su mente nuevamente, recordó el momento que marco su vida con aquel dios, entro al lugar emocionado, sus nuevas espadas en su espalda, quería presumirlas y probarlas con su amigo – arles amigo- dijo el al entrar en la arena, por un segundo no supo qué hacer, una figura imponente lo miraba del cielo, sentado en un trono arriba en el cielo, era un gigante de más de seis metros, si su tamaño fuera normal sería hermoso, pero aquel tamaño lo hacía ver grotesco al menos para sus ojos, noto el grito de su amigo, dos seres pateaban su cuerpo el inmóvil en la arena trataba de proteger su rostro y entro en acción rápidamente, llego al borde de la arena, 3 metros para abajo lo separaban de su amigo, tomo las espadas en su espalda y con gracia salto cayendo limpiamente al suelo en la arena, se lanzo sobre aquellos seres y clavo su espada en la garganta de uno haciéndolo caer al instante, fue un instante, los ojos de Zeus se clavaron en el cuerpo de lord vheilian, miraba cada movimiento de este embelesado por el arte de aquel vampiro que lo cautivo, se lanzo hacia atrás llevando su espada ala altura de sus costillas con el filo al revés y clavo la espada en el vientre del otro ser este alcanzo a dar un zarpazo en su cuello pero la velocidad de lord vheilian era mucho mayor dio un giro a su arma y giro su cuerpo pateando el pecho de aquel ser alejándolo de su amigo, saco un par de dagas y las lanzo con fuerza clavándolas en el pecho de aquella criatura que le miraba horrorizado, vheilian le dio la espalda y se agacho a ver a su amigo, se le partió el corazón al ver el ataque brutal que había recibido tomo su mano y lo miro fijamente -¿Amigo estas bien?-la preocupación era notoria en su rostro, arles clavo su mirada en su amigo y sonrió – he estado peor amigo créeme- la risa estridente de Zeus interrumpió la escena, vheilian se coloco de frente de su amigo en señal de que lo protegería - ¿Es enserio muchacho? – Dijo Zeus mirando a vheilian divertido - ¿acaso crees que puedes enfrentar a un dios?- lord vheilian miro con desprecio a Zeus y con seguridad le contesto – si ese dios atenta contra la vida de alguien que me importa si - era notorio que a Zeus le divertía aquello de lado derecho de su trono una aljaba era el contenedor de una serie de flechas, lord vheilian agudizo su vista y noto que no eran flechas eran rayos, Zeus extendió su mano a la aljaba y tomo uno en sus manos, miro a vheilian desde el cielo y lanzo el rayo en dirección a él, sintió golpe en su hombro y noto como era la mano de su amigo el cual creció al tamaño mismo de Zeus deteniendo el rayo antes de impactar – PADRE TE HE DICHO MIL VECES QUE ME DEJES EN PAZ- Arles en tamaño ahora gigante miraba con odio a su padre - ¿acaso no sabes que el hogar de un dios es el Olimpo? - hablo pero sin dejar de mirar a vheilian, sin duda alguna el valor de aquel vampiro lo había hecho interesarse en el – TU MISMO ME DIJISTE QUE NO ERA UN DIOS COMO LOS DEMAS ¿NO ES ASI? Por fin puso atención en arles y lo miro entristecido – esa sed de sangre y lucha tu ya terminara contigo arles un día, me extraña en vedad que por fin lograras tener un amigo- arles volteo a ver a vheilian y noto la mirada de deseo de su padre – NO PADRE NO, NI LO PIENSES SI QUIERA- Zeus miraba embelesado a vheilian, estaba atrapado por lago que tenía el vampiro y lo deseaba tanto, bajo del trono y mientras lo hacia su tamaño comenzó a bajar, quedando a una estatura relativamente normal, camino con paso firme hasta el lugar donde estaba vheilian, arles le impidió el paso tomando un tamaño normal el también – NO LO TOQUES ES MI AMIGO COMO HAZ DICHO Y NO TE PERTENECE PADRE- Zeus puso un dedo en el pecho de arles este inmediatamente se arrodillo al suelo sin poder moverse le ofreció su mano a vheilian este la tomo y Zeus lo levanto del suelo – Fuerza, Valor, Coraje, Amor y Entereza ¿Cómo puedes tener esas cualidades siendo lo que eres?- entonces lo entendió, vheilian actuó por instinto, como lo haría al proteger a una de sus hijas o algún miembro de su familia, no le importa las consecuencias de sus actos, aquel que le había ayudado a levantarse era Zeus dios de los dioses del Olimpo – este no lose- dijo al tiempo que bajo su rostro avergonzado.
Aquel encuentro con Zeus le cambiara tanto, ordeno a arles le entrenara y le preparara para ser un semi dios, arles tubo que obedecer a regañadientes y en los entrenamientos le decía que se negara, que era mejor morir que darle gusto a ese ser, pero también le emocionaba el hecho de vheilian con los poderes de un semi dios, las luchas serian increíbles y ese hecho en si lo ayudaba a continuar con el entrenamiento, lord vheilian.
Volvió de su mente una ves mas, había llegado al lugar, esa puerta enfrente de, él, la entrada al Olimpo, la cita divina para encontrarse con la muerte según algunos, pero él pensaba solo en su familia y su amigo y en si podría o no ganarle a un dios.
Continuara…..
viernes, 21 de enero de 2011
CAPÍTULO CINCO
Mis huesos estaban machacados y el sudor entraba por mis ojos nublándome la visión y esos malditos seres no paraban de surgir de entre las sombras del moviliario,
mis movimientos eran rápidos, directos y mortaces danzarines acompañados de mis fieles cuchillas, el sabor de la sangre me mantenía en rigor, el sabor de mi propia sangre, mi mente no cesaba... Mis brazos se estaban aflojando, la sonrisa siniestra y triunfal de cada uno de aquellos reptíles era sobrecogedor, rostros carentes de dientes, sólo un par de colmillos en la parte superior de la boca y una lengua bífida surgía de aquella abertura sin labios, tampoco poseían orejas sino más bien una diminuta perforación a cada lado del rostro y aquellos ojos, fríos como hielo y todas ellas puestas en mí, localizándo la manera de acabar con mi cuerpo. Mis brazos y piernas extenuados y mis ojos mostraban ya cansancio y agotamiento mental, con cada uso de mi energía requería un consumo de sangre de mis venas y en ese preciso momento me estaba quedando sin ambas, pude sentir como mi corazón me pedía a gritos una cantidad de sangre y de hecho, tenía hambre y ya hacía más de 24 horas que no me alimentaba y el consumo de energía había sido mayor, no dudé más y tomé a una de aquellas criaturas sin pensar en las consecuencias, era eso o caer en frenesí y pagar con las consecuencias que con ello conllevase, me abrazé a la cintura de un hombre-serpiente, mis manos le tomarón el rostro mientras que con mis piernas me agarraba y sostenía en sus caderas y mordí la piel escamosa. Su piel era dura, pero más lo eran mis colmillos y desgarré un trozo de carne, la sangre poseía un sabor nauseabúndo y tan fuerte que incluso sentí desmoronarme, sería el hambre o la desesperación por acabar con aquellos seres que proseguí saciando mi sed, la criatura chillaba y se había aferrado a mis hombros y estaba tratando de soltárme, pero cuanto más tiraba de mí, con más fuerza apresaba la piel en mis colmillos, las otras criaturas durante unos segundo tan sólo observaban inertes al acto, hasta que tomarón partido y avanzarón para "rescatar" a su congénere, mi cuerpo se preparó para la defensa, me incorporé sin soltar mi presa y usé su propio cuerpo a modo de escudo mientras sentía la succión de sangre a mayor escala trás recibir los golpes. Noté su corazón latir desbocado e imágenes de un muchacho me invadió la mente, era un jovén de cabellos castaño claro y largo que caía por la espalda y ojos diminutos pero viváces de un color cristalino, aquel muchacho de aspecto emo era aquella cosa a la que estaba devorándo ahora mismo. A medida que aquellas imágenes tomaban formas en mi mente y que la velocidad del corazón de aquel insecto con piernas se iba debilitándo algo en mi interior estaba naciendo, mi piel se iba escamando mis ojos se iban volviéndo fríos y escurridizos, mis cabellos fuerón recogiéndose y tomándo forma siseante, mis piernas desaparecierón tomándo en su lugar una forma uníforme de una cola que iba disminuyendo acabando en una punta, solté a mi presa ya sin vida, una lengua bífida asomó por mis labios saboreándo la sangre que yacía adjudicada en mis mejillas y mi mente, puestos en los seres que me observaban con asombro y pánico tomé una nueva palabra concentrándo mi nueva energía en ese único punto "Tall" y mi cuerpo empezó a aumentar de tamaño rompiéndo las columnas y vigas de la estancia, tube que inclinar la cabeza para no golpearme con el techo, aún así seguía aumentándo mi tamaño y aquellas criaturas espavoridas correteándo sin saber dónde esconderse chillándo antes de cruzárse con mi cola que los aplastaba. Una sonrisa reptíl asomó mi rostro y mi boca se abrió y de ella salió un vapor, un humo verdoso que recorría cada esquina, moldeándose hasta cubrirlo todo, axfisiándo a los hombres-serpientes. Los cuerpos se iban amontonándo unos encima de otros sobre los escombros y casquetes de las piedras y los restos de los pilares. El veneno de mi aliento no dejaba de salir, y aduras penas se podía visualizar nada entre aquella atmósfera verdosa y neblinosa, y de repente, como un golpe en mi nuca algo me despertó.... XXDIABOLOXXX... Rápidamente mi forma tomó de nuevo mi forma natural y llevándome las manos a mi cara para evitar envenenárme con mi propia energía salí corriéndo de allí dándo saltos para esquivar los cuerpos mutilados y/o envenenados y volteando las columnas a medida que emprendía velocidad vampírica, intuía que algo no andaba bien...
La carrera me condujo a un pasillo,en él una masacre había sido testigo de las infinidades muertes que ahora se hallaba allí, centenares de cuerpos o quizás miles de cuerpos decapitados, mutilados o descuartizados decoraban el piso, la sangre era un río bravío que incluso me llegaba a las rodillas, columnas de diseño obsceno con extremidades acabados en lanzas empalaban otros tantos de aquellos seres, la raza de mi amado.... plumas seguían cayendo del techo como una llovizna, trozos de carnes y tripas decoraban las paredes como trofeos, tragé saliva. Mi corazón desbocado me gritaba que estar allí era una locura, mi mente chillaba, pero mis ojos no cesaban en observar cada cuerpo, aterrorizada por descubrir en alguno de ellos el cuerpo sin vida de mi amado. Caminé torpemente por entre la sangre tropezándo con algún brazo o alguna pierna, alejaba de mí de la superficie líquida restos de alas y/o caras que flotaban a la deriva "¡Dios!" pensé mientras unas lágrimas empapaban mis mejillas y el terror se dibujaba en mi cara, caminé hasta llegar al extremo del pasillo y topárme con una puerta enorme de color negro, que tenía todo el aspecto de conducir a una sala importante, ya que en los marcos se dibujaban con algún material metálico una tipografía mostrándo una imágen chinesca que representaba unos demonios menores empalando o deborándo lo que podría tratárse de seres inferiores condenados a la eternidad infernal, las puertas poseían estipografías de unas espinas entrelazadas entre sí, ovalándose entre sus extremidades y dando forma a unas palabras que no logré traducir, aunque por la dureza con la que se mantenían cerradas las puertas, suponía que en esas letras se hallaba la forma de abrir las puertas. "¡Oh! preciosa Rayne, por fin te vuelvo a ver... mi preciosa niña...." el sonido se oía en todas partes, envolviéndolo todo como el mismo aire, me moví en busca del orígen de aquella voz, me resultaba tan familiar.... "Adelante querida, pasa a mi reino, llevaba mucho tiempo esperándote, mi niña".... "Dí Nefistófeles en diablo y el camino se oscurecerá" no sé por qué, pero era como si aquellas letras de las puertas tomaran significado para mí, pero seguía sin saber cómo acceder al otro lado. Le dí muchas vueltas, observé cada parte del pasillo buscándo la respuesta de entre los muertos pero era clarividente que no lograría hallar la llave de aquella manera. Desesperada y con el ansías de salir de aquel pasillo golpeé las puertas con todas mis fuerzas, desde luego, no consiguiría nada pero necesitaba sacar la rabia y la impotencia de sentírme estancada... "¿Por qué te demoras tanto, mi niña?" nuevamente aquella voz familiar y sin saber cómo, pronuncié Nefistófeles, así sin más y las puertas se abrieron... recapacité unos segundos, no era el decir aquel nombre en otro idioma, sólo bastaba que un ser de naturaleza infernal, un ser que deboraba sangre de criaturas infernales como en la de los marcos dijera aquella palabra y las puertas se abrirían... la oscuridad otorgaría mi camino, la oscuridad ya formaba parte de mí desde mi convención, aquella noche que mi madre y mi hermana fueran brutalmente asesinadas, cuando mis ojos se encontrarón con los rojizos y sangrientos ojos de Lord Vheilian cuando éste se cruzó en aquel caminar sin rumbo y perdída en la oscuridad.
La escena que a continuación vería, dejaría helado mi alma, desgarrándome la sangre... mi amor, mi amado... encadenado aún con vida, a un par de columnas por las muñecas con los brazos estirados en horizontal, con la cabeza hacia adelante, le habían arrancado sus hermosas alas, su cuerpo estaba oculto por la sangre ya coagulada y presentaba golpes y cortes en brazos, pecho y vientre terribles que me hacían dudar si realmente habría logrado sobrevivir a tales heridas. Más allá donde estaba el cuerpo de XXDIABOLOXXX yacía dos tronos con sillones aterciopelado con colores oscuros a ambos lados de los tronos y un escalón elevaba los tronos haciéndolos destacar la sobervía de quienes tomaran aquellos asientos y en uno de aquellos tronos, un cuerpo descansaba triunfal.... ahogé un grito cuando reconocí a aquel hombre, el asesino de mi familia estaba allí... "Bien, bien.... me has reconocido... lástima que sólo recuerdes aquel trágico incidente, mi niña"... caminé a pasos lentos hasta colocárme junto a mi amado, me agaché y tomé su cabeza entre mis pechos en un abrazo de nostálgia y resentimiento, lamenté no haberme dado prisa, si hubiese llegado antes.... "no habrías logrado salvarle, de hecho, lo mantengo con vida porque sabía que era la única manera de atraerte hasta mí, mi niña" levanté mi mirada y la posé en los ojos inexistentes de aquel rostro pálido de cabellos tan negros como la misma oscuridad "¿Quién eres y cómo sabes mi nombre?" "Rayne, querida... es hora de que conozcas tu pasado"..... -CONTINUARÁ-
P.D. en el próximo capítulo se revelará mi pasado mortal, espero sea más llevadero que mi anterior capítulo y éste mismo, disculpen si no ha sido muy elocuente, pero quería darle forma de "saltos" en el tiempo sin previo aviso, Un saludo y espero os guste la historia ;) Atte. xRaynexBlood
Mis huesos estaban machacados y el sudor entraba por mis ojos nublándome la visión y esos malditos seres no paraban de surgir de entre las sombras del moviliario,
mis movimientos eran rápidos, directos y mortaces danzarines acompañados de mis fieles cuchillas, el sabor de la sangre me mantenía en rigor, el sabor de mi propia sangre, mi mente no cesaba... Mis brazos se estaban aflojando, la sonrisa siniestra y triunfal de cada uno de aquellos reptíles era sobrecogedor, rostros carentes de dientes, sólo un par de colmillos en la parte superior de la boca y una lengua bífida surgía de aquella abertura sin labios, tampoco poseían orejas sino más bien una diminuta perforación a cada lado del rostro y aquellos ojos, fríos como hielo y todas ellas puestas en mí, localizándo la manera de acabar con mi cuerpo. Mis brazos y piernas extenuados y mis ojos mostraban ya cansancio y agotamiento mental, con cada uso de mi energía requería un consumo de sangre de mis venas y en ese preciso momento me estaba quedando sin ambas, pude sentir como mi corazón me pedía a gritos una cantidad de sangre y de hecho, tenía hambre y ya hacía más de 24 horas que no me alimentaba y el consumo de energía había sido mayor, no dudé más y tomé a una de aquellas criaturas sin pensar en las consecuencias, era eso o caer en frenesí y pagar con las consecuencias que con ello conllevase, me abrazé a la cintura de un hombre-serpiente, mis manos le tomarón el rostro mientras que con mis piernas me agarraba y sostenía en sus caderas y mordí la piel escamosa. Su piel era dura, pero más lo eran mis colmillos y desgarré un trozo de carne, la sangre poseía un sabor nauseabúndo y tan fuerte que incluso sentí desmoronarme, sería el hambre o la desesperación por acabar con aquellos seres que proseguí saciando mi sed, la criatura chillaba y se había aferrado a mis hombros y estaba tratando de soltárme, pero cuanto más tiraba de mí, con más fuerza apresaba la piel en mis colmillos, las otras criaturas durante unos segundo tan sólo observaban inertes al acto, hasta que tomarón partido y avanzarón para "rescatar" a su congénere, mi cuerpo se preparó para la defensa, me incorporé sin soltar mi presa y usé su propio cuerpo a modo de escudo mientras sentía la succión de sangre a mayor escala trás recibir los golpes. Noté su corazón latir desbocado e imágenes de un muchacho me invadió la mente, era un jovén de cabellos castaño claro y largo que caía por la espalda y ojos diminutos pero viváces de un color cristalino, aquel muchacho de aspecto emo era aquella cosa a la que estaba devorándo ahora mismo. A medida que aquellas imágenes tomaban formas en mi mente y que la velocidad del corazón de aquel insecto con piernas se iba debilitándo algo en mi interior estaba naciendo, mi piel se iba escamando mis ojos se iban volviéndo fríos y escurridizos, mis cabellos fuerón recogiéndose y tomándo forma siseante, mis piernas desaparecierón tomándo en su lugar una forma uníforme de una cola que iba disminuyendo acabando en una punta, solté a mi presa ya sin vida, una lengua bífida asomó por mis labios saboreándo la sangre que yacía adjudicada en mis mejillas y mi mente, puestos en los seres que me observaban con asombro y pánico tomé una nueva palabra concentrándo mi nueva energía en ese único punto "Tall" y mi cuerpo empezó a aumentar de tamaño rompiéndo las columnas y vigas de la estancia, tube que inclinar la cabeza para no golpearme con el techo, aún así seguía aumentándo mi tamaño y aquellas criaturas espavoridas correteándo sin saber dónde esconderse chillándo antes de cruzárse con mi cola que los aplastaba. Una sonrisa reptíl asomó mi rostro y mi boca se abrió y de ella salió un vapor, un humo verdoso que recorría cada esquina, moldeándose hasta cubrirlo todo, axfisiándo a los hombres-serpientes. Los cuerpos se iban amontonándo unos encima de otros sobre los escombros y casquetes de las piedras y los restos de los pilares. El veneno de mi aliento no dejaba de salir, y aduras penas se podía visualizar nada entre aquella atmósfera verdosa y neblinosa, y de repente, como un golpe en mi nuca algo me despertó.... XXDIABOLOXXX... Rápidamente mi forma tomó de nuevo mi forma natural y llevándome las manos a mi cara para evitar envenenárme con mi propia energía salí corriéndo de allí dándo saltos para esquivar los cuerpos mutilados y/o envenenados y volteando las columnas a medida que emprendía velocidad vampírica, intuía que algo no andaba bien...
La carrera me condujo a un pasillo,en él una masacre había sido testigo de las infinidades muertes que ahora se hallaba allí, centenares de cuerpos o quizás miles de cuerpos decapitados, mutilados o descuartizados decoraban el piso, la sangre era un río bravío que incluso me llegaba a las rodillas, columnas de diseño obsceno con extremidades acabados en lanzas empalaban otros tantos de aquellos seres, la raza de mi amado.... plumas seguían cayendo del techo como una llovizna, trozos de carnes y tripas decoraban las paredes como trofeos, tragé saliva. Mi corazón desbocado me gritaba que estar allí era una locura, mi mente chillaba, pero mis ojos no cesaban en observar cada cuerpo, aterrorizada por descubrir en alguno de ellos el cuerpo sin vida de mi amado. Caminé torpemente por entre la sangre tropezándo con algún brazo o alguna pierna, alejaba de mí de la superficie líquida restos de alas y/o caras que flotaban a la deriva "¡Dios!" pensé mientras unas lágrimas empapaban mis mejillas y el terror se dibujaba en mi cara, caminé hasta llegar al extremo del pasillo y topárme con una puerta enorme de color negro, que tenía todo el aspecto de conducir a una sala importante, ya que en los marcos se dibujaban con algún material metálico una tipografía mostrándo una imágen chinesca que representaba unos demonios menores empalando o deborándo lo que podría tratárse de seres inferiores condenados a la eternidad infernal, las puertas poseían estipografías de unas espinas entrelazadas entre sí, ovalándose entre sus extremidades y dando forma a unas palabras que no logré traducir, aunque por la dureza con la que se mantenían cerradas las puertas, suponía que en esas letras se hallaba la forma de abrir las puertas. "¡Oh! preciosa Rayne, por fin te vuelvo a ver... mi preciosa niña...." el sonido se oía en todas partes, envolviéndolo todo como el mismo aire, me moví en busca del orígen de aquella voz, me resultaba tan familiar.... "Adelante querida, pasa a mi reino, llevaba mucho tiempo esperándote, mi niña".... "Dí Nefistófeles en diablo y el camino se oscurecerá" no sé por qué, pero era como si aquellas letras de las puertas tomaran significado para mí, pero seguía sin saber cómo acceder al otro lado. Le dí muchas vueltas, observé cada parte del pasillo buscándo la respuesta de entre los muertos pero era clarividente que no lograría hallar la llave de aquella manera. Desesperada y con el ansías de salir de aquel pasillo golpeé las puertas con todas mis fuerzas, desde luego, no consiguiría nada pero necesitaba sacar la rabia y la impotencia de sentírme estancada... "¿Por qué te demoras tanto, mi niña?" nuevamente aquella voz familiar y sin saber cómo, pronuncié Nefistófeles, así sin más y las puertas se abrieron... recapacité unos segundos, no era el decir aquel nombre en otro idioma, sólo bastaba que un ser de naturaleza infernal, un ser que deboraba sangre de criaturas infernales como en la de los marcos dijera aquella palabra y las puertas se abrirían... la oscuridad otorgaría mi camino, la oscuridad ya formaba parte de mí desde mi convención, aquella noche que mi madre y mi hermana fueran brutalmente asesinadas, cuando mis ojos se encontrarón con los rojizos y sangrientos ojos de Lord Vheilian cuando éste se cruzó en aquel caminar sin rumbo y perdída en la oscuridad.
La escena que a continuación vería, dejaría helado mi alma, desgarrándome la sangre... mi amor, mi amado... encadenado aún con vida, a un par de columnas por las muñecas con los brazos estirados en horizontal, con la cabeza hacia adelante, le habían arrancado sus hermosas alas, su cuerpo estaba oculto por la sangre ya coagulada y presentaba golpes y cortes en brazos, pecho y vientre terribles que me hacían dudar si realmente habría logrado sobrevivir a tales heridas. Más allá donde estaba el cuerpo de XXDIABOLOXXX yacía dos tronos con sillones aterciopelado con colores oscuros a ambos lados de los tronos y un escalón elevaba los tronos haciéndolos destacar la sobervía de quienes tomaran aquellos asientos y en uno de aquellos tronos, un cuerpo descansaba triunfal.... ahogé un grito cuando reconocí a aquel hombre, el asesino de mi familia estaba allí... "Bien, bien.... me has reconocido... lástima que sólo recuerdes aquel trágico incidente, mi niña"... caminé a pasos lentos hasta colocárme junto a mi amado, me agaché y tomé su cabeza entre mis pechos en un abrazo de nostálgia y resentimiento, lamenté no haberme dado prisa, si hubiese llegado antes.... "no habrías logrado salvarle, de hecho, lo mantengo con vida porque sabía que era la única manera de atraerte hasta mí, mi niña" levanté mi mirada y la posé en los ojos inexistentes de aquel rostro pálido de cabellos tan negros como la misma oscuridad "¿Quién eres y cómo sabes mi nombre?" "Rayne, querida... es hora de que conozcas tu pasado"..... -CONTINUARÁ-
P.D. en el próximo capítulo se revelará mi pasado mortal, espero sea más llevadero que mi anterior capítulo y éste mismo, disculpen si no ha sido muy elocuente, pero quería darle forma de "saltos" en el tiempo sin previo aviso, Un saludo y espero os guste la historia ;) Atte. xRaynexBlood
Suscribirse a:
Entradas (Atom)